Aaron Ramsey, mediocampista de los Pumas de la UNAM, atraviesa uno de los momentos más difíciles desde su llegada a México, tras la desaparición de su perrita Halo en San Miguel de Allende, Guanajuato. Tanto él como su esposa, Colleen Ramsey, han compartido mensajes emotivos en redes sociales, reflejando su angustia y esperanza.
Colleen difundió en Instagram una imagen con fondo suave y una huella blanca en el centro, acompañada de un mensaje en inglés y español que expresa la incertidumbre de la familia: “Aún no hemos encontrado a Halo. No creo que lo encontremos nunca. Tenemos preguntas serias. Puede que nunca obtengamos respuestas. Gracias por su apoyo y oraciones”.
Por su parte, Aaron publicó una fotografía en la que besa tiernamente a Halo, en lo que parece ser una despedida cargada de dolor. La imagen se volvió viral rápidamente, recibiendo miles de reacciones y muestras de apoyo por parte de seguidores, colegas y defensores de los animales.
Halo, una perrita beagle que formaba parte de la familia Ramsey, se extravió a principios de octubre durante un viaje familiar a San Miguel de Allende. Desde entonces, la pareja ha realizado esfuerzos intensivos por localizarla, incluyendo búsquedas con drones, megáfonos y una recompensa de hasta 400 mil pesos.
A casi tres semanas sin avances, la familia comenzó a aceptar la posibilidad de no volver a verla. Ramsey expresó en su mensaje: “No creo que la encontremos nunca”, que ha conmovido a miles y se ha convertido en símbolo de la tristeza que viven.
Aunque aún no se confirma si Halo fue robada, se extravió por accidente o alguien la está resguardando, los mensajes recientes indican que la familia empieza a resignarse. Sin embargo, el llamado a la comunidad sigue vigente y cualquier información podría ser crucial.
La historia ha generado empatía en redes sociales, donde usuarios comparten imágenes, hashtags y mensajes de esperanza. Halo se ha convertido en un símbolo de amor incondicional y pérdida, trascendiendo el ámbito deportivo.
Los Ramsey han reiterado que seguirán buscando mientras exista una mínima esperanza. Su caso ha resonado entre amantes de los animales, deportistas y medios internacionales. En medio del dolor, su mensaje ha contribuido a visibilizar el vínculo emocional entre humanos y mascotas, y la importancia de actuar con empatía ante situaciones similares.
