Agustín Carstens, exgobernador del Banco de México y director general del Banco de Pagos Internacionales (BIS) hasta junio de 2023, afirmó que la emisión de monedas por parte de empresas privadas ha salido del control y será difícil de contener, advirtiendo sobre los riesgos que esto representa para el sistema financiero tradicional.
Durante su participación en el foro “Conmemoración del Centenario del Banco de México: Baluarte de la Institucionalidad”, organizado por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Carstens expresó que las monedas paralelas y otros tipos de monedas ya están en circulación y que recuperarlas dentro del sistema formal será complejo.
El exfuncionario resaltó que una de las principales funciones de los bancos centrales es mantener la estabilidad monetaria, pero reconoció que cada vez hay más dinero que no proviene de un banco central, lo cual puede generar riesgos futuros.
Además, señaló que uno de los desafíos inmediatos es que los bancos centrales y el sistema financiero no están ofreciendo las formas tecnológicas de dinero que la sociedad requiere actualmente.
"El principal reto es que existen monedas que pueden ser emitidas por privados y que intentan cumplir funciones que actualmente corresponden al dinero emitido por bancos centrales y la banca comercial, que es el dinero que usamos en la vida diaria", afirmó.
Por otra parte, Alejandro Díaz de León, exgobernador de Banxico, puntualizó que la emisión de dinero en efectivo—billetes y monedas—es un símbolo de confianza hacia la economía y las instituciones públicas. Resaltó que su valor intrínseco ha sido reconocido por la sociedad durante siglos.
Este escenario plantea importantes desafíos para la regulación y estabilidad del sistema financiero, que deberá adaptarse a las nuevas formas de dinero digital y garantizar que las funciones del banco central sigan siendo relevantes en un entorno cada vez más digitalizado.