**Abril de 2025, el mes con más personas desaparecidas en el Estado de México en siete décadas**
Toluca, Edomex., 5 de mayo de 2025.- El mes de abril de 2025 cerró con un récord histórico de desapariciones en el Estado de México, al registrar 238 casos, la cifra más alta en los últimos 70 años según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO).
Hasta la fecha, en 2025, se continúan buscando a 802 personas en la entidad, de las cuales casi el 30% corresponden a abril. Este incremento representa un aumento del 36% en comparación con el mismo mes del año pasado, cuando se reportaron 175 desapariciones.
Desde 1952 y hasta el 2 de mayo de 2025, el Estado de México ha reportado más de 13 mil personas desaparecidas, consolidándolo como uno de los focos rojos a nivel nacional en esta problemática.
El aumento en los casos de desaparición coincide con un reciente anuncio del gobierno estatal, que destacó que abril fue también el mes con menos homicidios dolosos en los últimos 100 meses. Organizaciones civiles cuestionan esta versión, sugiriendo que las cifras oficiales podrían estar enmascarando realidades más complejas.
Iván Chávez Espejel, presidente de la asociación Ciudadanos Uniformados A.C., expresó que la reducción aparente en homicidios podría estar relacionada con una reclasificación de víctimas, muchas de las cuales estarían siendo reportadas como personas desaparecidas y posteriormente enviadas a fosas comunes sin identificación.
El Observatorio Nacional Ciudadano respaldó estas dudas, señalando que en municipios del sur del Estado de México, como Texcaltitlán, Luvianos, Tlatlaya y Sultepec, no se reportan homicidios dolosos, pese a la presencia documentada de grupos delictivos en esas regiones.
Por su parte, Sol Salgado Ambros, excomisionada de Búsqueda del Estado de México, advirtió que la cifra real de desapariciones podría ser aún mayor, debido al temor de las familias en zonas del sur a denunciar por posibles represalias. “El miedo es tan grande que muchas desapariciones no son reflejadas en las estadísticas oficiales”, comentó.
La diferencia entre las cifras oficiales y las percepciones en el terreno revela una crisis profunda y silenciada, donde las desapariciones aumentan mientras la violencia se disfraza con datos que pueden parecer optimistas.