Alertan en Colorado por conejos silvestres infectados con un virus que produce 'tentáculos' y protuberancias

Por: Equipo de Redacción | 13/08/2025 19:00

Alertan en Colorado por conejos silvestres infectados con un virus que produce 'tentáculos' y protuberancias

La ciudad de Fort Collins, en Colorado, Estados Unidos, se encuentra en alerta tras avistamientos de conejos silvestres que presentan alteraciones físicas causadas por un virus. Estos animales, conocidos como “Frankenbunnies” o conejos Frankenstein, muestran protuberancias oscuras y tentáculos en su rostro, atribuibles a una infección viral.

Los conejos en cuestión pertenecen a la especie de la cola de algodón y están infectados con un virus que provoca el crecimiento de pústulas y formaciones verrugosas en áreas como el cuello, la cabeza y el hocico. Algunos residentes describen a estos animales como ‘zombis’, asemejándose a criaturas de la serie de HBO Max, The Last of Us. Sin embargo, la presencia de este virus en conejos silvestres es una condición conocida y relativamente frecuente.

Según la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Missouri, el Virus del Papiloma del Conejo, también llamado Virus de Shope, es un virus de ADN que afecta principalmente a conejos de cola de algodón en el Medio Oeste de Estados Unidos. La transmisión ocurre generalmente a través de insectos vectores como pulgas, mosquitos, ácaros y garrapatas.

Los animales infectados desarrollan lesiones cutáneas elevadas y rojas, que posteriormente se transforman en verrugas, comúnmente en las orejas y párpados, aunque pueden aparecer en otras partes del cuerpo. Los tumores presentan una apariencia de papilomas con cuerpos duros y queratinizados, que no representan una amenaza para los humanos ni para las mascotas. No obstante, las autoridades aconsejan no acercarse ni tocar a los conejos infectados.

Desde 1930, se tiene documentado el Virus del Papiloma en conejos, aunque en épocas pasadas se pensaba erróneamente que eran especies diferentes, denominándolos en ocasiones como ‘liebres cornudas’. Estas alteraciones físicas, aunque impactantes, corresponden a una enfermedad viral que ha sido estudiada desde hace décadas y que, en la actualidad, mantiene su perfil en los avistamientos en áreas rurales y urbanas en Estados Unidos.