Durante su ponencia en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, el politólogo Andrés Malamud explicó que los resultados electorales del próximo domingo fortalecerán al oficialismo en el Congreso, aunque perderá en varias provincias. ”El Gobierno logrará conquistar varias provincias y en esas también incorporará legisladores”, afirmó.
Malamud detalló que el oficialismo duplicará su número de diputados en Diputados, pasando de unos treinta y tantos a entre sesenta y setenta y tantos. En el Senado, la alza será similar: de seis senadores a aproximadamente entre doce y quince, aunque con provincias donde perderá.
El especialista destacó que estas elecciones son provinciales y que cada distrito tiene su propia dinámica. ”En la mayoría, la disputa es entre el gobernador y la oposición, no directamente contra el kirchnerismo”, aclaró, señalando que en diecinueve distritos la contienda enfrenta a los oficialismos nacionales y provinciales, ambos con buena aceptación.
El análisis se enfocó en lo que podría ocurrir después del domingo. Malamud propuso tres escenarios estratégicos que adoptarán los bloques políticos:
1. La estrategia Karina, que representa a un espacio libertario dispuesto a usar todos los recursos disponibles, pero que aún no posee la fuerza necesaria en ninguna cámara para sostener un juicio político, veto o decreto.
2. La estrategia Javier, cuyo objetivo es construir una minoría de bloqueo, alcanzando un tercio en Diputados con alianzas que permitan frenar vetos y decretos, disuadiendo impulsos de juicio político.
3. La estrategia Santiago, que busca construir mayorías para aprobar leyes, entendiendo que no hay reformas sin legislación y que estas se logran a través del consenso, incluso con aliados opositores.
Malamud advirtió que esta última estrategia ya se puso en práctica con la ley Bases y que, aunque requiere votos peronistas, ha mostrado que es posible negociar con provincias como Tucumán, Salta, Catamarca y Santiago del Estero.
El politólogo también reflexionó sobre cómo un eventual proceso de reforma en Argentina involucraría consensos cruzados, en lugar de líneas divisorias internas, diferenciándose de la tendencia actual a la fragmentación política.
Antes de abordar las elecciones, Malamud repasó los grandes cambios globales (descongelamiento del Ártico, transición demográfica y revolución tecnológica) que, en su opinión, están transformando radicalmente el escenario mundial y, en consecuencia, el país.
En cuanto a la relación Argentina con Estados Unidos y China, el análisis destacó la dependencia del país en ambos actores, con China como socio para mercados y swaps, y EE. UU. para rescates. Mencionó que las propuestas de Javier Milei logran un apoyo notable en medio de una coyuntura delicada, casi un milagro, dado que Estados Unidos no tiene mucho tiempo para seguir sosteniendo a una nación tan alejada geográficamente.
Finalmente, Malamud prevé que el domingo marcará un punto de inflexión en la política interna, con un proceso de desacople en marcha. Sin guerra, pero en retroceso, el país enfrenta una disputa entre formalización e informalización.
Cerró su intervención con una frase irónica y aguda: “Vamos redondeando, así les cuento quién va a ganar el domingo. Después, les cuento lo que pasará el lunes, que es más difícil”.