TOLUCA, Edo. de México, 26 de mayo de 2025.- Para alcanzar el éxito, existen varios caminos: la suerte, las recomendaciones, los amiguismos o el trabajo constante, el tropezar, levantarse y buscar la fórmula adecuada para mantenerse, modernizarse y mejorar cada día. Esta última opción caracteriza sin duda al entrenador del momento en México, Antonio Ricardo Mohamed Matijevich, quien ha pasado a la historia del fútbol mexicano por ser el primer técnico en ganar campeonatos con cuatro equipos distintos, logrando lo que solo había conseguido Víctor Manuel Vucetich.
Antes de alcanzar la fama, Mohamed tuvo que remar contra corriente y aceptar proyectos en los que no inició con buen pie: Zacatepec, Morelia, Querétaro, Chiapas y Veracruz fueron los primeros equipos en confiar en él tras colgar los botines. En estas instituciones, pasó sin destacar de manera significativa, pero siempre con la confianza de que la buena suerte llegaría.
En 2010, Mohamed decidió regresar a Argentina para intentar cambiar su suerte. Con Independiente logró su primer título internacional, anotándose la Copa Sudamericana tras vencer al Goiás brasileño en penales, después de empatar a tres en el global. Este triunfo fue un punto de inflexión para su carrera, pues posteriormente regresó a México y en el Apertura 2012, con los Xolos de Tijuana, logró su primer campeonato local, al coronarse en el Estadio Nemesio Díez ante Toluca, con un marcador global de cuatro a uno.
Dos años después, fue contratado por América tras la salida de Miguel Herrera a la selección nacional. Sin embargo, sus roces con Ricardo Peláez fueron evidentes, y en plena liguilla se filtró que el club ya tenía a su reemplazo. A pesar de ello, Mohamed llevó al equipo a la final, derrotando a Tigres, y se despidió con la frase: “Les dejo la copa, me llevo mi dignidad”.
En 2019, tras recorrer Brasil, España y Argentina, Mohamed regresó a Monterrey para rescatar la temporada. Con su dirigencia, los Rayados calificaron en octavo lugar, eliminaron a Santos y Necaxa, y llegaron a la final contra América. En un partido de revancha, los regiomontanos sorprendieron en penales a las Águilas del Piojo Herrera, en un duelo en el que Mohamed, con lágrimas en los ojos, sostuvo el escapulario de su hijo fallecido.
Seis años después, Mohamed volvió a demostrar su talento. En menos de seis meses, armó un equipo sólido que lo llevó a liderar la liga y derrotar al otrora tricampeón. Su objetivo ahora es hacer historia con Toluca, devolver al equipo a los primeros lugares y buscar conquistar su undécimo campeonato en el fútbol mexicano, igualando a las Chivas del Guadalajara en la lista de grandes clubes del país.