¿Apagar o mantener encendida la calefacción durante la ola de frío? La respuesta que sorprende a muchos

20/11/2025 00:00 | 2 min de lectura

¿Apagar o mantener encendida la calefacción durante la ola de frío? La respuesta que sorprende a muchos

¡Se acerca una ola de frío intenso en toda España! La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) advierte que las temperaturas se asemejarán a pleno invierno, con mínimas bajo cero, nevadas en la cordillera Cantábrica y los Pirineos, y heladas generalizadas en el interior y norte del país. ¿Qué hacer con la calefacción en estas condiciones extremas? La duda de millones de hogares es si es mejor dejarla encendida a baja potencia o apagarla cuando nadie está en casa y solo encenderla cuando realmente se necesita.

Tradicionalmente, muchos piensan que mantener la calefacción encendida de forma constante ayuda a evitar picos de consumo y mantiene una temperatura estable. Pero, ¿es realmente así? Expertos del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE) explican que esta costumbre puede ser ineficiente e incluso costosa.

La clave está en entender cómo funciona la pérdida de calor en nuestras viviendas. Cuando apagamos la calefacción, la temperatura interior baja, pero también disminuye la diferencia entre el interior y el exterior, lo que ralentiza la pérdida de calor. Durante ese período, la casa pierde menos calor y el sistema consume energía solo al volver a calentarla. Además, reducir solo 1 °C en la temperatura del hogar puede resultar en un ahorro del 7 % en el consumo de energía.

¿Y qué recomendaciones ofrecen los expertos? Apagar la calefacción durante la noche y cuando no hay nadie en casa, y usar ropa térmica o textiles cálidos para mantener el confort. Los termostatos programables o sistemas inteligentes facilitan esta gestión y ayudan a ahorrar sin sacrificar la comodidad.

Un aspecto fundamental para optimizar la eficiencia es mejorar el aislamiento térmico: ventanas con doble cristal, sellado de rendijas y cerramientos estancos reducen la pérdida de calor, independientemente de la estrategia que elijas. ¿La conclusión? No es necesario dejar la calefacción encendida todo el día. Con una buena gestión y un buen aislamiento, puedes afrontar el frío intenso sin gastar de más ni sacrificar tu confort.

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