
En la avenida Solidaridad Las Torres, en la colonia El Seminario en Toluca, se evidencian viviendas improvisadas construidas sobre el camellón que corre debajo del viaducto del Tren Interurbano México-Toluca, conocido como ‘El Insurgente’.
Estas viviendas están formadas por lonas, madera, plásticos y láminas, y están rodeadas por colchones, sillones abandonados y restos de materiales de construcción. Durante una visita de El Sol de Toluca, se documentaron al menos tres espacios utilizados como viviendas precarias en una franja de terreno federal que, según el Plan Parcial de Desarrollo Urbano del Tren Interurbano, será transformada en un parque lineal de más de 20 kilómetros.
Varias de estas estructuras están ocultas entre arbustos y postes de alta tensión, otras están levantadas con piedras y cercadas con escombros.
La Secretaría de Desarrollo Urbano e Infraestructura (Sedui) informó que el camellón que atraviesa Toluca, Lerma, Metepec, Ocoyoacac, San Mateo Atenco y Zinacantepec será rehabilitado como un corredor urbano con zonas verdes, andadores peatonales, cruces seguros, mobiliario urbano y ciclovías. Este plan forma parte de un modelo de regeneración urbana vinculado al Tren Interurbano, cuya primera etapa fue inaugurada en septiembre de 2023.
El objetivo del parque lineal, según la autoridad, es impulsar el desarrollo económico, social y ambiental en el Valle de Toluca, además de incluir estrategias en movilidad, medio ambiente y ordenamiento territorial, con participación ciudadana y de especialistas. Uno de los propósitos es dar valor a los espacios bajo el tren, actualmente infrautilizados.
El tramo revisado en El Seminario muestra signos de abandono: colchones en mal estado, ropa desechada, restos de cemento, tubos de PVC, residuos de losas y piezas metálicas. En varios puntos se localizaron fogones, depósitos de agua y plásticos reutilizados como techumbre o muro.
Algunas viviendas tienen sillones, camas y cobertores visibles desde el exterior; también hay basura doméstica y acumulaciones de escombro que dificultan el paso peatonal. La maleza y cercos improvisados con tablas, láminas y lonas dificultan aún más el acceso.
Vecinos consultados señalaron que estas ocupaciones comenzaron hace más de un año y que han reportado la situación al ayuntamiento de Toluca, sin que se hayan visto acciones concretas para su retiro o regularización. "Dicen que será un parque, pero parece un tiradero y hay casas por todos lados. Ya ni se puede caminar por aquí, hay que bajar al arroyo vehicular", comentó una habitante.
Hasta el momento, la Secretaría de Desarrollo Urbano e Infraestructura (Sedui) y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) no han emitido pronunciamiento oficial sobre estos asentamientos, ni han publicado fechas para comenzar las obras del parque lineal en este tramo.
El Plan Parcial de Desarrollo Urbano requiere primero recuperar y limpiar la franja bajo el tren, pero no especifica cómo atender casos de ocupaciones informales. Tampoco hay señales de vigilancia o maquinaria en el lugar.
Mientras tanto, el número de viviendas improvisadas y residuos parece aumentar, complicando el proceso de recuperación. La propuesta de parque lineal contempla acciones coordinadas entre diferentes niveles de gobierno para crear un espacio accesible y seguro, destinado a fortalecer la cohesión social en las comunidades cercanas.
No obstante, las ocupaciones irregulares en áreas clave del trazo generan preocupación entre habitantes y generan dudas sobre cómo se gestionará su desalojo o reubicación en el futuro.