En los últimos 25 años, México ha experimentado un incremento en la gravedad de daños causados por riesgos hidrometeorológicos, lo que ha llevado al sector asegurador a desembolsar cantidades crecientes para cubrir estas pérdidas, advirtió Norma Alicia Rosas, directora general de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS). Según datos de la organización, entre 2000 y 2012, las aseguradoras pagaron en promedio 3,978 millones de pesos por incidentes relacionados con estos eventos. Sin embargo, desde 2012 hasta la fecha, ese monto ha escalado a aproximadamente 6,692 millones de pesos, reflejando no solo una mayor frecuencia, sino también una mayor gravedad en los daños ocasionados, explicó Rosas en rueda de prensa. La ejecutiva señaló que el incremento en el monto a pagar supera el crecimiento del número de asegurados, lo que indica un aumento en la severidad de los daños. Las viviendas son las propiedades más afectadas, representando el 35 por ciento de las indemnizaciones, seguidas por hoteles con 16.8 por ciento, oficinas con 13.3 por ciento, tiendas departamentales con 9.6 por ciento y bodegas con 7.5 por ciento. Estos seis sectores concentran más del 87 por ciento de las indemnizaciones por riesgos hidrometeorológicos, evidenciando la vulnerabilidad del patrimonio familiar y la infraestructura productiva ante eventos cada vez más extremos. Rosas destacó que, a diferencia de los sismos, estos fenómenos naturales, como huracanes, lluvias intensas, inundaciones y vientos fuertes, sí pueden ser predecidos, lo que permite una mejor preparación, incluyendo la contratación de seguros adecuados. La especialista recomendó a la población revisar cuidadosamente las pólizas, pues muchas coberturas no solo contemplan huracanes sino también granizadas, heladas, marejadas, golpes de mar, avalanchas de lodo e incluso nevadas. Casos recientes en Ciudad de México, donde vehículos quedaron atrapados en pasos a desnivel debido a inundaciones, subrayan la necesidad de tomar medidas preventivas, agregó Rosas. La directora de la AMIS resaltó que la industria aseguradora es fundamental no solo para hacer frente a estos daños, sino también para acelerar la recuperación económica y del turismo tras catástrofes naturales. finalmente, hizo un llamado a la ciudadanía a estar preparada y revisar sus coberturas para una protección adecuada frente a estos eventos cada vez más frecuentes y severos.