A pesar de que el cartel de Cali fue desmantelado en los años 90 y la mayoría de sus integrantes murieron o siguen presos en Estados Unidos, siguen emergiendo detalles inéditos sobre esta emblemática estructura criminal.
Previo a la presentación de su libro, 'Gilberto y yo', Aura Rocío Restrepo, quien fue la última pareja del líder del cartel, Gilberto Rodríguez Orejuela, compartió en entrevista con Infobae Colombia aspectos de su vida relacionados con el narcotráfico.
Desde el momento de la captura de Rodríguez Orejuela, del que estuvo presente, hasta sus diferencias respecto a Pablo Escobar, Restrepo ofreció un análisis de aquella etapa de su vida. Recordó el 9 de junio de 1995, fecha en que se capturó al jefe del cartel de Cali, quien, según ella, ya había acordado entregarse con el apoyo de la justicia.
"Sabíamos que estaban tras nosotros. Veníamos de una reunión con las Farc para tratar de evitar que enviaran droga a Estados Unidos y él ya había pactado con 'Pacho' Herrera para entregarse", relató. Además, explicó cómo el capo usaba el alias César Augusto Marmolejo para burlar a las autoridades.
Antes de ser descubiertos por las fuerzas policiales en Cali, Restrepo recordó cómo pasó por la clínica donde su abuela se encontraba muy grave, y cómo ella misma fue capturada tras una rápida confrontación con el Bloque de Búsqueda. La captura marcó un punto de inflexión en su vida, llevándola a reflexionar sobre su relación con Gilberto.
"Me capturaron con Gilberto ese mismo año y, en la cárcel, me di cuenta de que no podía seguir con eso por la maternidad. Mi decisión fue definitiva después de verlo llorar por amor y suplicarme. La maternidad cambió mi perspectiva", confesó.
Luego de que Gilberto le propusiera muchas cosas, Restrepo decidió poner fin a su relación, especialmente cuando estaba embarazada y ya tenía otro esposo. La distancia y las heridas permitieron que ella rehaciera su vida, formando una familia y teniendo hijos.
Sobre la muerte de Gilberto, Restrepo afirmó que nunca pudo despedirse realmente, pero que el video que le envió fue una forma simbólica de cerrar esa etapa. Aseguró que Gilberto respetó aquella decisión y que nunca interfirió en su proceso de reconstrucción.
Finalmente, Restrepo comparó a Pablo Escobar con Gilberto Rodríguez Orejuela, señalando que, en su opinión, Escobar sí era un 'demonio', impulsado por su familia y sin las reflexiones que sí hizo el líder del cartel de Cali, quien, según ella, mostró arrepentimiento y buscó en su vejez borrar sus errores.
Luego de años, Restrepo concluye que nunca sintió que viviera con un demonio, sino con un hombre mayor, cansado de la vida, que había reflexionado sobre sus acciones, a diferencia de Escobar, quien, en su opinión, nunca tuvo esa oportunidad.
