El líder de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), Álvaro López Ríos, anunció que el 10 de noviembre se realizará una gran marcha nacional hacia la Ciudad de México para exigir maquinaria agrícola y condiciones justas para los productores rurales.
“¡La lucha continúa! porque el gobierno no comprende la importancia de atender al campo”, expresó López Ríos en entrevista con El Sol de México. El dirigente advirtió sobre la situación crítica que enfrentan los productores de granos básicos, acusando que los gobiernos de la Cuarta Transformación (4T) han sido igual o peores que administraciones anteriores.
Según López Ríos, los gobiernos actuales han reducido presupuestos y eliminado programas que el Movimiento Campesino Organizado logró en el pasado, además de desmantelar instituciones como Financiera Rural, que anteriormente brindaba créditos al sector agrícola.
Resaltó que, sumando los 30 años de gobiernos priístas y panistas, más los 7 años de Morena, el campo mexicano se encuentra en condiciones de desastre y ruina. Recordó las protestas del 14 de octubre pasado, donde los productores exigieron precios justos para el maíz y la exclusión de los granos básicos del T-MEC, de cara a su revisión en 2026.
López Ríos enfatizó que los productores están en un reclamo creciente, y criticó que las promesas de autosuficiencia y soberanía alimentaria hechas por los gobiernos morenistas no se han cumplido; en cambio, México depende cada vez más de importaciones estadounidenses.
El dirigente rememoró la oposición inicial al TLCAN y a las reformas al Artículo 27, señalando que esas políticas fueron consideradas dañinas para el campo y la propiedad social.
Para defender sus demandas, López Ríos propuso mantener una política de desarrollo que garantice autosuficiencia y soberanía alimentaria, y continuar presionando por un trato justo a los productores rurales.
Criticó además que, pese a la declaración de la 4T como un gobierno “no neoliberal”, en la práctica solo ha beneficiado a las élites económicas, mientras la desigualdad y la pobreza persisten. Finalizó reiterando que el modelo de desarrollo económico sigue sin cambios fundamentales y que la brecha social permanece igual.
El llamado es a acompañar la marcha para exigir justicia y apoyo al sector agrícola en un momento crítico para el campo mexicano.