
El primer ministro de Canadá, Mark Carney, indicó este martes que el país podría retirar algunos de los aranceles que ha impuesto a Estados Unidos con el fin de reducir el impacto económico en su nación.
En un evento en el oeste de Canadá, Carney fue cuestionado acerca de la decisión del gobierno estadounidense, bajo la administración de Donald Trump, de aplicar aranceles del 35 por ciento a exportaciones canadienses no incluidas en el tratado T-MEC, mientras que Washington extendió por 90 días las negociaciones con México sin nuevos gravámenes.
El primer ministro explicó que el objetivo de las medidas de represalia de Canadá siempre ha sido lograr "el máximo impacto en EU y el mínimo en Canadá". Añadió que no ajustan automáticamente los aranceles, sino que evalúan qué medidas son más efectivas para proteger sus industrias, y en algunos casos, consideran retirar los gravámenes.
Además, Carney reveló que no ha tenido conversaciones recientes con Donald Trump.
Por otra parte, anunció un paquete de apoyo por hasta 1,200 millones de dólares canadienses (unos 871 millones de dólares estadounidenses) dirigido a la industria maderera de Canadá, uno de los sectores más afectados por las tarifas estadounidenses.
El pasado jueves, la administración Trump anunció una nueva ronda de aranceles que entrarán en vigor el 7 de agosto, afectando a múltiples países. Canadá es uno de los principales afectados y ha sido de los pocos que ha respondido con represalias comerciales a la primera ola de gravámenes.