La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reafirmó su intención de presentar una reforma para eliminar las listas de legisladores de representación proporcional, conocidas como plurinominales, en el Congreso de la Unión.
"Queremos que sigan existiendo elecciones limpias y democráticas. Es falso que seamos un gobierno autoritario... pero sí es muy importante revisar el tema de los plurinominales", expresó Sheinbaum. Además, señaló que para garantizar la representación de minorías políticas, existen otros mecanismos, como asignar espacios en las cámaras a candidatos que quedaron en segundo lugar en las elecciones, similar a las prácticas en la Ciudad de México y el Senado.
La mandataria destacó que un mecanismo así permite que los legisladores tengan contacto directo con la ciudadanía, ya que quienes hacen campaña en territorio son quienes realmente representan intereses populares.
Sobre la posible aprobación de esta reforma, Sheinbaum aseguró que no enfrentará resistencia del Partido del Trabajo ni del Partido Verde, aliados de Morena, con quienes mantiene una mayoría calificada necesaria para aprobar cambios constitucionales.
En relación al Instituto Nacional Electoral (INE), Sheinbaum afirmó que mantendrá su autonomía e independencia, aunque contemplan reducir su presupuesto. Asimismo, propuso disminuir también el financiamiento a todos los partidos políticos, en línea con los esfuerzos por austeridad.
Respecto a una reforma para mejorar el funcionamiento de las fiscalías, la presidenta descartó que esta se concrete en 2023. Aseguró que la Consejería Jurídica de la Presidencia ha enfocado sus esfuerzos en la elaboración de leyes secundarias relacionadas con la reforma del Poder Judicial, para agilizar los procesos judiciales.
Explicó que dichas leyes, que ya fueron enviadas al Congreso, se prevé que sean aprobadas en septiembre, permitiendo que los nuevos jueces, ministros y magistrados que inicien funciones el 1 de ese mes puedan operar bajo un nuevo marco legal.
Finalmente, Sheinbaum señaló que, tras avanzar en las leyes secundarias del Poder Judicial y en una nueva legislación electoral, podrán trabajar en la reforma a las fiscalías para mejorar su funcionamiento, en línea con los objetivos de justicia expedita señalados en la reforma constitucional.