¿Debo llevar abrigo y paraguas o ropa ligera y gorra hoy en Monterrey? Aquí tienes el pronóstico del clima para este martes 21 de octubre. Durante el día, se prevé una temperatura máxima de 33 grados Celsius, con un 0% de probabilidad de lluvias, una nubosidad del 8% y ráfagas de viento de hasta 26 kilómetros por hora. Los niveles de radiación ultravioleta alcanzarán hasta 6. En la noche, la temperatura descenderá a 17 grados, con una probabilidad de precipitación del 1%, nubosidad del 7% y ráfagas de viento de 18 kilómetros por hora. La mejor temporada para visitar Monterrey es de enero a agosto y de octubre a diciembre, cuando el clima suele ser cálido y seco, con temperaturas entre 27 y 35 grados y mínimas lluvias. Durante el verano, en particular entre julio y agosto, la ciudad enfrenta sequías intensas conocidas como 'canícula'. La temporada de lluvias inicia en otoño, con septiembre siendo el mes más lluvioso, aunque en ocasiones se han registrado tormentas severas que provocan inundaciones entre abril y junio. Enero es típicamente el mes más frío, con temperaturas promedio alrededor de 14 grados, mientras que en febrero se registran los días más fríos. La temperatura más baja en la historia de Monterrey fue de -7.5 grados en 1983, y la última nevada ocurrió en diciembre de 2004. Por otro lado, la temperatura más alta fue de 48 grados en abril de 1958. La falta de preparación para fenómenos meteorológicos tiene un costo diario superior a los 25 millones de pesos para las empresas mexicanas, según la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS); entre 2012 y 2024, se pagaron en promedio 7,6 mil millones de pesos anuales por siniestros relacionados con tormentas e inundaciones. Con la temporada de huracanes abierta hasta el 30 de noviembre, la vulnerabilidad de las empresas aumenta, y las previsiones para 2025 indican una actividad ciclónica elevada, con varias tormentas y huracanes. El experto en seguros Eduardo Gutiérrez recomienda fortalecer tres áreas clave: contar con seguros adecuados, protocolos internos sólidos y alianzas estratégicas. Es importante destacar que una póliza integral debe incluir coberturas por huracanes, tormentas, granizo, deslaves, inundaciones, interrupciones en operaciones, daños en bienes en tránsito o fuera de planta, gastos por reubicación temporal, remoción de escombros y atención prioritaria en siniestros. Además, se aconseja revisar periódicamente los valores asegurados y actualizar la ubicación de los activos. Contar con un Plan de Respuesta ante Tormentas que incluya planeación anual, preparación, acciones durante el evento, recuperación y actualizaciones constantes, es fundamental para minimizar el impacto. Finalmente, los protocolos internos, como canales de comunicación seguros y mecanismos para documentar daños, son esenciales para gestionar los riesgos de manera efectiva, señala la especialista Alicia Martínez.