Cofre de Leyendas / La maldición del cura

Por: Equipo de Redacción | 27/05/2025 07:00

Cofre de Leyendas / La maldición del cura

En 1811, en la zona conocida como Rosales, existía un párroco muy popular, aunque rodeado de murmullos tanto religiosos como civiles, lo que le valió algunos enemigos.

El conflicto surgió cuando Don Tomás, tras ser amonestado por el párroco por tener un romance con una joven, acusó al sacerdote de conspirar contra el gobierno. Esto llevó a la apertura de una investigación contra el cura Carrasco.

El investigador Francisco de la Cerna fue invitado a una tertulia en la parroquia para demostrar que no existía tal conspiración. La reunión, que se extendió hasta las tres de la mañana y en la que se consumió vino en exceso, impidió que el investigador regresara a su alojamiento. Aceptando la invitación del párroco, decidió pasar la noche en la iglesia.

A la mañana siguiente, al intentar despertar al visitante, el cura lo encontró muerto en su sueño, sin poder brindarle ayuda.

Pronto, comenzaron a circular rumores en la comunidad, y una carta al gobernador acusaba al párroco de haberlo asesinado. La admiración inicial se convirtió en rechazo. El párroco, enfrentado a la ira popular, exclamó: “Pueblo malagradecido, yo os maldigo, ni el polvo de vuestra tierra deseo que me acompañe más; que el Santo Dios Todopoderoso os condene al fuego”.

Tras demostrar su inocencia, el clero ordenó que se trasladara a predicar a un mineral. En una misa, bajó del púlpito llorando, pidiendo a la comunidad que rezara por la misericordia de Dios para un pueblo considerado maldito.

En 1940, durante la reconstrucción de la iglesia de Rosales, se hallaron varios cuerpos de personas muertas en el mismo día en que el cura oró por la comunidad.

Sobre el autor
Equipo de Redacción

Periodista especializado en noticias de actualidad.

Comparte esta noticia