
Costa Rica entregó este martes a las autoridades de Estados Unidos al ciudadano nicaragüense Elías Herrera Hernández, requerido por un tribunal de Texas por presuntos delitos de abuso sexual y violación en perjuicio de una menor de edad. La extradición fue realizada desde el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) mediante la Oficina Central Nacional de la Interpol en el aeropuerto internacional de San José, tras un proceso legal que contó con la aprobación del Tribunal de Juicio de Heredia.
El detenido, de 46 años y con nacionalidad nicaragüense, también era investigado por su presunta vinculación con la estructura delictiva conocida como La H (también llamada “Los Hondureños”), radicada en Limón. Esta banda ha estado vinculada a episodios violentos en esa provincia, como tiroteos en zonas portuarias y ajustes de cuentas entre narcotraficantes.
Según la policía judicial, esta organización utilizaba la costa caribeña para embarcar cocaína en pangas rápidas hacia Honduras, con rutas que posteriormente conectaban con México y Estados Unidos. Herrera Hernández fue detenido en abril de 2020, después de haber estado fugitivo por 21 años, y enfrenta cargos por abuso sexual y violación en perjuicio de una menor presuntamente cometidos en 2004.
El proceso de extradición se gestionó entre Costa Rica y Estados Unidos, con un tribunal costarricense autorizando la entrega en el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría a representantes de la DEA. La entrega se concretó a las 6:05 a.m. del martes 21 de octubre, con Herrera siendo entregado formalmente a las autoridades estadounidenses, en cumplimiento de los trámites legales bilateral. Ahora, enfrentará en Texas cargos relacionados con los delitos mencionados.
De acuerdo con informes judiciales, Alexander Zacarías y Guillermo Gilberto Herrera Hernández, hermanos de Elías, también están investigados por narcotráfico y vínculos con funcionarios costarricenses que estarían implicados en el transporte internacional de cocaína. Estos tres hermanos habrían financiado operaciones logísticas para trasladar drogas desde Nicaragua hacia Costa Rica y Panamá, con supuestos favores y protección judicial facilitados por el ex magistrado Celso Gamboa, actualmente bajo investigación en EE. UU. por presunto tráfico de drogas y corrupción.
Según la acusación, entre 2020 y 2022 se habrían movilizado unas tres toneladas de cocaína en rutas controladas por La H, con protección de funcionarios en Costa Rica. La principal fuente de información fue Alexander Zacarías Herrera Hernández, quien decidió colaborar con la DEA a cambio de beneficios judiciales, y aportó testimonios que facilitaron la solicitud de extradición de Gamboa.
El testimonio reveló también que parte de los cargamentos eran almacenados en bodegas en el Caribe costarricense y en zonas rurales de Heredia, para luego ser enviados hacia puertos en Honduras y México. Celso Gamboa negó todas las acusaciones, asegurando que fue utilizado como testigo y que nunca le decomisaron droga, sosteniendo que las acusaciones en su contra son infundadas y basadas en testimonios falsos.