La búsqueda de Cristian Villanueva, conocido en redes sociales como Crhiss Vanger, ha revelado nuevas irregularidades. Vecinos aseguran que dejó su vivienda hace tres meses y que nunca residió en la dirección registrada ante Reniec.
Simultáneamente, decenas de inversionistas exigen respuestas por los depósitos realizados en su plataforma Vanger Haus, que ofrecía rentabilidades mensuales del 10%. La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP confirmó que el influencer no tenía autorización para captar dinero del público.
Mientras los afectados reportan pérdidas que superan los miles de soles, Vanger niega las acusaciones, admite una deuda parcial y afirma que es víctima de una campaña de desprestigio.
La historia de Crhiss Vanger empezó rodeada de lujo y mensajes motivacionales. En redes sociales promocionaba un estilo de vida orientado al éxito rápido y el emprendimiento, generando una comunidad leal. Así nació Vanger Haus, su presunto proyecto de inversión que prometía ganancias del 5% al 10% mensual.
El sistema se presentaba como una oportunidad exclusiva. Sus seguidores esperaban la señal de la palabra "cupo" en sus historias, y en cuanto la veían, muchos realizaban transferencias para asegurarse una plaza en la inversión. Un denunciante, que prefirió mantenerse en el anonimato, relató: "Era como una lotería financiera. Creíamos que era real porque algunos ya habían recibido pagos".
Las inversiones variaban desde cinco mil soles hasta cifras mayores como ciento diez mil. Los testimonios coinciden en que se realizaron transferencias sin comprobantes formales, contratos con cláusulas de confidencialidad y promesas de devolución que nunca se cumplieron. Otro afectado contó: "Le reclamé mi dinero y me dijo que no lo faltara al respeto. Pero, ¿cómo llamarlo si no es un engaño?".
La incertidumbre aumentó cuando los afectados intentaron contactarlo y no obtuvieron respuesta. Sus publicaciones desaparecieron y su domicilio en Lima fue revisado, sin éxito: "Ya se mudó hace tres meses", señaló un vecino. Además, en la dirección registrada en Reniec, nadie lo conocía; un residente comentó: "Nunca ha vivido aquí, parece haber dado una dirección falsa. Tengo cartas notariales que llegan a su nombre y que termina tirando a la basura".
Se intentó localizarlo en otras zonas sin éxito. La lista de denunciantes crece, y en grupos creados por afectados se comparten comprobantes, audios y mensajes del influencer. Algunos aseguran que mantiene contacto con ciertos inversionistas, aunque sin devoluciones concretas.
Desde la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP se indicó que Cristian Villanueva figura en registros de entidades informales por captar dinero ilegalmente. Un portavoz explicó: "No tiene autorización para recibir depósitos. Quien entregue dinero en entidades no autorizadas asume el riesgo de perderlo todo".
En medio del escándalo, Vanger reapareció en redes sociales con videos donde intenta aclarar su situación. Negó haber cometido estafas y afirmó que las cifras difundidas son falsas. "Los montos que han presentado no existen. Tengo pruebas de eso. Reconozco que tengo una deuda y voy a saldarla".
Sus declaraciones, sin embargo, no calmaron a los afectados, quienes exigen una respuesta formal. Una víctima que perdió 31 mil soles declaró: "No queremos disculpas, queremos nuestro dinero".
El paradero de Vanger aún es incierto. Algunos testigos afirman que salió del país a inicios de octubre, mientras que él asegura que permanece en Perú. Su silencio ante medios y la imposibilidad de localizarlo en las direcciones oficiales han incrementado la tensión. La investigación fiscal continúa, y las víctimas se organizan en busca de justicia, enfrentando un patrón de promesas de riqueza rápida, contratos sin validez y confianza traicionada.