Durante la Operación Liberación, llevada a cabo en 14 municipios del Estado de México, las autoridades detectaron un nuevo método de extorsión presuntamente empleado por el grupo criminal La Familia Michoacana: el control ilícito de la distribución de paquetes.
En Tejupilco, las fuerzas del orden establecieron que el grupo criminal había instalado un centro de acopio en el que interceptaban envíos destinados a municipios del sur de la entidad. Empresas como Mercado Libre, Estafeta y FedEx fueron las principales afectadas, ya que sus paquetes eran retenidos en ese punto.
Los integrantes del grupo revisaban los contenidos y establecían un cobro ilegal al destinatario para entregar el paquete. Si no se pagaba la ‘cuota’, el envío no se entregaba. En algunos casos, si el contenido resultaba atractivo, se quedaban con los artículos.
En la diligencia de cateo, las autoridades localizaron más de 800 paquetes, los cuales serán devueltos a sus legítimos dueños mediante procesos oficiales.]
Este hallazgo evidencia el control económico que ejercía el crimen organizado sobre la zona, a través de redes de extorsión y apropiación ilegal de bienes, afectando la distribución de productos en municipios del sur mexiquense.