
El número de personas reportadas como desaparecidas al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha crecido aproximadamente un 70 por ciento en los últimos cinco años, atribuido al incremento de conflictos y migraciones masivas. La organización con sede en Ginebra hizo un llamamiento para fortalecer el respeto por las leyes de guerra y proteger a las personas en medio de enfrentamientos.
“El aumento en las desapariciones evidencia que las partes en conflicto y quienes las apoyan no están protegiendo a las personas durante las guerras”, afirmó Pierre Krähenbühl, director general del CICR.
Según datos del organismo, a finales de 2022 se reportaron 284 mil 400 desaparecidos, frente a 169 mil 500 en 2019. Los conflictos en Sudán, Gaza y Ucrania han sido algunos de los principales detonantes del incremento, aunque se estima que la cifra real puede ser mucho mayor.
Los Convenios de Ginebra, firmados en 1949, buscan prevenir estas separaciones forzadas, pero el respeto por estas normativas ha disminuido, advirtió el CICR. Krähenbühl resaltó que medidas más contundentes para prevenir desapariciones, proteger a los detenidos y gestionar correctamente los fallecidos podrían evitar que muchas familias vivan décadas de angustia.
El CICR, en colaboración con las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y la Media Luna Roja alrededor del mundo, trabaja en la búsqueda de personas desaparecidas y en el restablecimiento de contactos familiares a través de la Red de Vínculos Familiares.
Actualmente, algunos equipos de la Agencia Central de Búsquedas del CICR operan en una antigua casa solariega en Ginebra, realizando llamadas y revisando documentos para localizar a las personas desaparecidas. Desde la guerra franco-prusiana en 1870, esta ha sido una labor constante del organismo.
El año pasado, en algunos casos, se lograron localizar a 16 mil 000 personas, destacaron desde el CICR, resaltando la importancia de estas acciones en medio de una situación humanitaria que solo sigue en aumento.