De extra en una película nominada a cuatro premios Oscar a uno de los mejores actores del mundo: la historia de Daniel Day-Lewis

Por: Equipo de Redacción | 23/10/2025 10:00

De extra en una película nominada a cuatro premios Oscar a uno de los mejores actores del mundo: la historia de Daniel Day-Lewis

La reaparición en los cines de Daniel Day-Lewis, quien protagonizará el filme Anemone dirigido por su propio hijo, Ronan Day-Lewis, es una noticia que emociona a los amantes del cine. Se trata de uno de los actores más reconocidos y premiados de la historia; el único, hasta ahora, con tres premios Oscar al Mejor Actor Principal. Su talento para transmitir emociones y su profunda entrega al oficio lo han llevado a transformar cada personaje, llevándolos a otro nivel.

Su forma de actuar ha hecho leyenda y ha alimentado rumores, a veces polémicos. Por ejemplo, se cuenta que en su papel como Christy Brown en Mi pie izquierdo, permaneció en una silla de ruedas durante todo el rodaje, o que en ocasiones no dirigió la palabra a los actores que interpretaban a sus antagonistas.

Recientemente, el propio actor señaló que los comentarios sobre su método de actuación, que implica una inmersión profunda en sus personajes, suelen provenir de personas que no comprenden realmente lo que implica su trabajo. Él aclaró que no se trata de una secta o ciencia engañosa, sino de una forma de liberarse emocionalmente para reaccionar con espontaneidad en escena.

Algunos de sus papeles más memorables ya forman parte de la historia del cine. Desde su premiada interpretación del magnate del petróleo en Pozos de ambición, hasta su papel como Abraham Lincoln. También destacan su intensidad en En el nombre del padre y su más reciente interpretación en El hilo invisible, donde encarnó a un estricto modisto.

Tras estos roles, Day-Lewis anunció que tomaría un descanso indefinido de las filmaciones, cansado del proceso que tanto le exige mentalmente, pues considera que su trabajo requiere una profunda comprensión emocional de sus personajes.

Ahora, Daniel Day-Lewis regresa a la pantalla con Anemone, una película que tiene un significado especial en su historia, ya que su primer contacto con el cine fue de una forma sorpresiva: como extra en la película Domingo, maldito domingo, dirigida por John Schlesinger en 1971, que recibió cuatro nominaciones al Oscar, incluyendo Mejor Guion y Mejor Dirección.

La aparición de un joven Daniel Day-Lewis, con apenas 14 años, en esa película abrió las puertas al mundo del cine. Aunque su estreno como protagonista llegó en los años 80 y su rostro se volvió cada vez más familiar, en aquel primer trabajo su participación fue en segundos y sin acreditar, marcando el inicio de una carrera que lo consolidó como uno de los grandes del séptimo arte.