El comienzo del otoño invita a combinar naturaleza, relajación y bienestar antes de que llegue el invierno. Una de las mejores maneras de celebrar esta estación es sumergirse en las aguas templadas de las piscinas termales que se encuentran en diferentes regiones de España.
Muchos de estos balnearios son de acceso gratuito y permanecen abiertos durante todo el año, ofreciendo la oportunidad de disfrutar de sus propiedades terapéuticas mientras admiras paisajes de tonos ocres y dorados propios del otoño. Estos lugares, donde historia, salud y belleza natural se fusionan, permiten desconectar sin afectar el bolsillo.
En el Parque Natural dels Ports, en Tarragona, destaca la Fontcalda, uno de los balnearios naturales más singulares de la región. Con aguas a 28 °C ricas en cloruro, calcio y magnesio, ofrece reconocidos beneficios terapéuticos. Su acceso libre y su ubicación en un entorno montañoso rodeado de vegetación crean un escenario otoñal inigualable. El Ayuntamiento de Gandesa se encarga de su conservación y apertura pública, haciendo de este un destino ideal para quienes buscan bienestar y aventura.
En Ourense, Galicia, se encuentran las Termas de Outariz, perfectas para relajarse al aire libre. Situadas a orillas del río Miño, ofrecen aguas termales a unos 40 °C con propiedades mineromedicinales que benefician especialmente al sistema nervioso y la musculatura. La entrada es gratuita, lo que las convierte en un plan perfecto para disfrutar en las tardes frescas de otoño.
En la localidad cacereña de Baños de Montemayor, se conservan termas con orígenes romanos. Sus aguas, que emergen a temperaturas entre 39 y 43 °C, son conocidas por aliviar dolencias reumáticas y articulares. Tanto el ayuntamiento como la diputación promueven su acceso público y gratuito durante todo el año, ofreciendo una experiencia que fusiona historia, cultura y bienestar en plena Vía de la Plata.
En La Rioja, las pozas de Arnedillo representan un emblema del termalismo natural en España. Ubicadas junto al río Cidacos, mantienen una temperatura constante de 40 °C durante todo el año. Sus aguas alivian afecciones musculares y cutáneas, siendo testimonio de una tradición balnearia que trasciende generaciones. Rodeadas de naturaleza riojana, son un atractivo tanto para locales como para visitantes que buscan relax sin coste alguno.
También en Ourense, las Termas de O Muíño da Veiga, a orillas del río Miño, destacan por sus aguas mineromedicinales a temperaturas de hasta 65 °C, que se enfrían a unos 40 °C para el baño. La vegetación autóctona y los espacios de descanso y vestuarios proporcionan una experiencia cómoda y completa para quienes desean desconectar bajo el cielo otoñal.
Estas piscinas termales gratuitas en diversas regiones de España ofrecen un refugio perfecto para recuperarse y disfrutar de la naturaleza durante el otoño, combinando salud, historia y paisajes únicos sin coste alguno.
