El abogado constitucionalista salvadoreño Enrique Anaya, conocido por sus duras críticas al presidente Nayib Bukele, fue arrestado este sábado acusado de lavado de dinero, informó la Fiscalía General. Organizaciones de derechos humanos califican la detención como parte de una ofensiva gubernamental para silenciar a quienes cuestionan al régimen.
Anaya fue detenido en su residencia en Santa Tecla, al oeste de San Salvador, y en redes sociales circularon videos donde se le ve esposado y siendo trasladado por agentes, con declaraciones donde denuncia que lo «encañonaron» durante la operación. La Fiscalía publicó imágenes en X en las que confirmó que será presentado ante los tribunales en los próximos días por los delitos de lavado de activos.
El abogado, columnista en diversos medios, ha sido un crítico abierto de las decisiones del gobierno, especialmente en relación con la concentración de poder, la reelección presidencial y la reciente detención de Ruth López, activista de la ONG Cristosal. En videos, López denuncia que fue víctima de irregularidades en su arresto y se autodefina como una “presa política”.
Bukele, quien ganó en 2024 con un 85% de respaldo en las urnas, ha sido acusado por sus críticos de imponer un régimen autoritario y de reprimir a opositores y activistas. El mandatario ha señalado a sus críticos como activistas de izquierda y ha advertido que la oposición “no es intocable”.
Cristosal emitió un comunicado condenando la detención de Anaya y acusando una actitud de represalia por su papel en la defensa de la democracia y la legalidad. La organización también resaltó la labor de López en investigar casos de corrupción y asistir a víctimas de las políticas de seguridad del gobierno.
Organismos internacionales como Amnistía Internacional y Human Rights Watch han expresado su preocupación por una posible escalada en la persecución de activistas críticos. El Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana (UCA) también expresó su rechazo a estas acciones, destacando la importancia de la libertad de expresión.
Nayib Bukele ha rechazado las críticas, acusando a las ONG de defender criminales y de movilizarse en un contexto de rechazo a su régimen de excepción, implementado desde hace tres años para combatir las pandillas, pero que también ha sido señalado por grupos internacionales por facilitar arrestos sin orden judicial.