El presidente y el tesorero de la Central de Abasto de Toluca, Jesús López y Luis Alberto Bobadilla, informaron que fueron liberados después de interponer un amparo, tras su detención por supuesta participación en un caso de extorsión.
En una conferencia de prensa, ambos negaron estar vinculados con el crimen organizado y aseguraron que su gestión en el centro de abasto ha sido transparente y honesta. Además, destacaron contar con el respaldo de los comerciantes del lugar.
López y Bobadilla fueron detenidos el pasado 30 de julio por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y enviados al penal de Santiaguito, en Almoloya de Juárez. Anunciaron que convocarán a los condóminos para informarles sobre su situación jurídica.
‘Venimos a dar la cara, como siempre lo hemos hecho. Todo lo que se dice de nosotros en redes sociales es falso. No tenemos vínculos con ningún grupo delictivo; nuestros vínculos son con la gente de la Central de Abastos’, afirmó el tesorero, acompañando por el secretario Juan Morales.
Cuestionado acerca de las presuntas organizaciones criminales que supuestamente intentan controlar la zona comercial, Bobadilla evitó responder por seguridad, aunque reiteró que su labor ha sido únicamente administrativa.
‘Tenemos la frente en alto. Nos dedicamos a trabajar y administrar los recursos de la mejor manera’, enfatizó.
Los directivos comentaron que ya enfrentaron acusaciones similares antes. Recordaron que en julio de 2024 fueron absueltos en un caso parecido y aseguraron que todo esto forma parte de una campaña de desprestigio.
‘Una vez más somos victimizados. El año pasado nos absolvieron de una acusación falsa y ahora enfrentamos otra. Confiamos en las instituciones’, expresó López.
Finalmente, pidieron a las autoridades actuar con responsabilidad y ética en todos los procesos que involucren a personas inocentes. Insistieron en que su gestión ha sido transparente y abierta a auditorías.
‘No hemos hecho nada indebido con los recursos de los comerciantes. Invitamos a realizar las auditorías necesarias’, concluyeron.