La historia de amor entre Melissa Klug y Jesús Barco es una de esas relaciones mediáticas que iniciaron con ilusión, pasión y promesas de amor eterno, pero que con el tiempo se desgastaron por las idas y venidas, dejando más de una decepción. Lo que en 2020 parecía un romance sólido entre 'la Blanca de Chucuito' y el joven futbolista, hoy solo es un recuerdo de lo que pudo ser.
Todo comenzó en 2020, cuando Melissa puso su mirada en Jesús Barco, un talento de 23 años que entonces militaba en Universitario de Deportes. En plena pandemia y en medio del aislamiento social, ambos comenzaron a verse en secreto. Según la empresaria, los encuentros eran privados y todo empezó como una amistad.
Con el tiempo, la química entre ellos fue evidente. Melissa comentó en una entrevista que fue un día en que coincidieron que simplemente hicieron 'clic'. A partir de allí, compartieron publicaciones, fotos en la playa y gestos que sugerían un amor en serio. La relación se convirtió en una de las más comentadas en la farándula peruana.
En 2021, Jesús Barco sorprendió a Melissa con una pedida de mano romántica. La esperó en su casa con letras gigantes que decían 'Marry Me', flores y un anillo de compromiso que ella aceptó emocionada. El momento fue viral en redes sociales, generando expectativas de una boda inminente. Sin embargo, la realidad sería distinta.
A pesar de los planes y la ilusión, el matrimonio nunca ocurrió. De 2021 a 2025, pasaron cuatro años, una hija en común y dos rupturas. La felicidad parecía completar cuando Melissa anunció su embarazo, una noticia que Magaly Medina difundió en su programa. La empresaria mostró orgullosa su pancita en redes sociales, mientras Barco compartía fotos tiernas con su hija.
Pero esa felicidad fue efímera. A finales de 2021, Magaly Medina reveló un ampay que puso en entredicho la fidelidad del futbolista. La noticia provocó una fuerte reacción en Melissa, quien en una entrevista explicó que perdió el control tras descubrir conversaciones comprometedoras.
'Le pedí el teléfono, le pregunté quién era la chica, por qué borraba las conversaciones... y él solo decía que no era nada', relató. En medio de la confusión, tomó la decisión impulsiva de terminar con Jesús, la cual anunció públicamente en redes sociales.
Pese a la ruptura, la relación se reactivó meses después, pero ya sin la misma intensidad. Las ausencias por los cambios de equipo del futbolista en 2025, trasladándolo primero a Nazca y luego a Huánuco, dificultaron aún más la relación. La distancia, las sospechas y las circunstancias terminaron por enfriar el vínculo.
Según allegados, Melissa ya intuía que el fin estaba cerca. Magaly Medina comentó que la separación era 'una crónica de una ruptura anunciada', y que la empresaria incluso había preparado un comunicado. Finalmente, Melissa Klug confirmó la separación definitiva, cerrando un ciclo que empezó con promesas de boda y terminó en un adiós silencioso.