El lirio acuático, especie invasora traída de Sudamérica y que se ha expandido en el río Lerma en San Mateo Atenco, representa un grave peligro para la flora y fauna local, según el ecólogo Aldo Gómez Benítez de la UAM Lerma. La planta forma una capa que bloquea la entrada de luz solar, afectando animales y plantas que dependen del calor y la luz para sobrevivir. Además, compite con especies nativas, desplazándolas y provocando su desaparición. Esta especie resiliente también tolera aguas contaminadas, lo que agrava su impacto sobre las plantas nativas más vulnerables. La proliferación del lirio podría causar extinciones locales y perjudicar a especies como los anfibios que necesitan luz para su supervivencia. La eliminación total es difícil y requiere trabajos constantes y planificados, preferentemente mediante maquinaria. Aunque el Plan de Restauaración Escolar del río Lerma contempla su retiro, Gómez Benítez critica la falta de interés de las autoridades locales, estatales y federales, lo que obliga a organizaciones ambientales a realizar esfuerzos por su cuenta. Confía en que las acciones oficiales sean efectivas y bien planificadas para recuperar el río.
