El peligro del reclutamiento digital: cómo jóvenes caen en redes delictivas en el Estado de México

Por: Equipo de Redacción | 24/10/2025 06:00

El peligro del reclutamiento digital: cómo jóvenes caen en redes delictivas en el Estado de México

Norberto Maldonado, especialista en Tecnologías de la Información y presidente de la Fundación Kooltivo, alertó sobre la forma en que las redes sociales son utilizadas para reclutar jóvenes en actividades delictivas en el Estado de México y otras entidades de México. Según explicó, los delincuentes emplean influencers, retos virales, ofertas de trabajo y mensajes privados para normalizar su actividad ilícita y captar víctimas potenciales.

El proceso de reclutamiento comienza con la promesa de dinero rápido y estatus social, en una estrategia que Maldonado describe como “groomear”: una manipulación emocional gradual mediante la cual los delincuentes se ganan la confianza de los jóvenes para posteriormente explotarlos.

Para conferir legitimidad y glamour a sus actividades, los criminales difunden en redes sociales fotos y videos de autos, viajes y dinero, usando microinfluencers y cuentas locales. Después de la seducción, los jóvenes son emocional y socialmente izolados, lo que aumenta su dependencia y facilita su incorporación a la cadena del delito.

Esta modalidad de reclutamiento digital, que alimenta una problemática global y trasnacional, impacta negativamente a comunidades y familias en México y en el mundo. Los jóvenes reclutados participan en actividades ilícitas como ataques a centros de llamadas dedicados al robo y extorsión de datos, y en actos de violencia.

Maldonado resaltó que la propaganda virtual no es inocua, ya que puede conducir a la explotación, entrenamiento y, en casos extremos, a la muerte.

El Estado de México se ubica entre las entidades con mayor número de casos reportados de reclutamiento digital, junto con Baja California, Colima, Chihuahua y Ciudad de México. Para enfrentar esta problemática, el especialista propuso medidas en tres niveles.

En cuanto a plataformas digitales, señala que no basta con cerrar cuentas o lanzar campañas informativas; se requiere una inteligencia digital sostenida, una fiscalía especializada con ciberdelincuentes y protocolos que obliguen a las plataformas a colaborar en la entrega de información para perseguir a los delincuentes.

Finalmente, Maldonado concluye advirtiendo que si no se actúa de manera conjunta, la respuesta continuará siendo fragmentaria y los jóvenes seguirán encontrando puertas abiertas hacia la delincuencia con solo un click.