Desde septiembre de 2024, cuando la gobernadora Delfina Gómez colocó la primera piedra del Centro de Bienestar Animal en Toluca, la construcción ha enfrentado obstáculos legales que han detenido su avance. En noviembre del mismo año, colectivos ambientales como INEETSI, Salvemos el Parque Sierra Morelos y vecinos lograron la suspensión provisional de la obra, la cual fue ratificada en diciembre con una suspensión definitiva por un juez.
Alma Diana Tapia Maya, responsable de la Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna (CEPANAF), comentó que «seguimos esperando que el tema legal se resuelva para tener una respuesta clara».
Mara Mora, integrante de INEETSI, explicó que el amparo presentado incluye 24 denuncias, entre ellas que la obra inició sin los permisos adecuados. Además, resaltó que la construcción impactó el perímetro del Área Natural Protegida (ANP), causando daño ambiental que los colectivos buscan reparar.
Los defensores del parque advierten que cualquier intervención en la zona puede afectar los ecosistemas, poniendo en riesgo la biodiversidad, incluyendo especies endémicas de flora y fauna.
El proyecto del Centro de Bienestar Animal tiene como finalidad crear un refugio para perros y gatos en situación de calle, controlar la sobrepoblación y garantizar una atención digna para los animales.
Antes de acudir a la vía legal, los colectivos proponían reubicar el centro, pero su solicitud fue rechazada. A partir de ahora, mientras se resuelve el amparo, aún no está claro si la construcción continuará en el Parque Sierra Morelos o si será trasladada a otra zona de Toluca, generando incertidumbre sobre su futuro operativo.
