El Estado de México reportó 861 homicidios dolosos entre enero y junio de 2025, situándose en el quinto lugar a nivel nacional y representando el 6.8% del total de víctimas en México, según el informe mensual del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), presentado este lunes en Palacio Nacional.
Durante la conferencia matutina, la titular del SESNSP, Marcela Figueroa Franco, explicó que la violencia homicida se concentra en siete estados: Guanajuato, Baja California, Sinaloa, Chihuahua, Estado de México, Guerrero y Michoacán. Entre estos, Guanajuato lidera con 1,606 homicidios en el primer semestre, equivalente al 12.6% del total nacional.
En junio, el Estado de México reportó 119 víctimas, ubicándose entre las seis entidades con mayores casos del país. En ese mes, Sinaloa ocupó por primera vez el primer lugar nacional con 10.5% del total mensual de homicidios, seguido por Guanajuato (8.7%) y Baja California (8.2%).
Figueroa Franco resaltó que estos datos mensuales permiten identificar cambios en la distribución geográfica de los homicidios, aunque los patrones persistentes se mantienen en regiones específicas con alta presencia de grupos criminales.
A pesar del número acumulado de víctimas, el informe señala una reducción del 36.2% en el promedio diario de homicidios en el Estado de México respecto a 2024, lo que lo ubica entre las 25 entidades con mayores avances en la disminución del delito.
A nivel nacional, las reducciones más significativas corresponden a Zacatecas (-61.2%), Chiapas (-58.2%), Quintana Roo (-51.3%) y Tamaulipas (-50.4%), además de estados como Nuevo León, Yucatán, San Luis Potosí, Morelos y Colima.
En conjunto, el promedio nacional de homicidios en junio fue de 65.6 casos diarios, el nivel más bajo desde 2016 y una disminución del 24.5% respecto a septiembre de 2024, cuando inició la actual administración.
El informe advierte que, aunque existe una tendencia general a la baja, la violencia homicida continúa concentrada en ciertas áreas del país, lo que requiere fortalecer las estrategias de seguridad focalizadas. Entre las medidas, destacan el seguimiento puntual del comportamiento delictivo por entidad y la colaboración entre fuerzas federales, estatales y municipales, particularmente en las regiones con mayor letalidad. Sin embargo, no se proporcionaron detalles específicos sobre las acciones en cada estado.
