Estados Unidos limitará las importaciones de carne argentina y refuerza controles sanitarios por fiebre aftosa

Por: Equipo de Redacción | 21/10/2025 22:30

Estados Unidos limitará las importaciones de carne argentina y refuerza controles sanitarios por fiebre aftosa

La posible reactivación de las importaciones de carne vacuna argentina por parte de Estados Unidos generó expectativa en el sector agroexportador, aunque las autoridades estadounidenses aclararon que el volumen será reducido. En una entrevista con CNBC, la secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, afirmó que el país no comprará grandes cantidades y enfatizó en los controles sanitarios debido al riesgo de fiebre aftosa.

Rollins explicó que Estados Unidos consume aproximadamente 12 millones de toneladas métricas de carne bovina anualmente, de las cuales 10 millones son de producción local. Los dos millones restantes provienen del extranjero, incluyendo tanto carne procesada como cortes musculares, considerados por muchos estadounidenses como una opción saludable.

La funcionaria indicó que las conversaciones con Argentina forman parte de un marco más amplio impulsado por el presidente Donald Trump, quien ha mencionado en varias ocasiones la posibilidad de abrir el mercado estadounidense a productos argentinos. Sin embargo, aclaró que el volumen de compra no será significativo en relación con el total consumido en el país.

Rollins resaltó que cualquier apertura comercial debe garantizar la seguridad sanitaria de la industria ganadera estadounidenses, enfatizando que Argentina enfrenta episodios de fiebre aftosa. Además, mencionó otros desafíos sanitarios, como el ingreso del gusano barrenador del ganado desde México, por lo que las importaciones están bajo estricta vigilancia.

Fuentes del Departamento de Agricultura informaron a CNBC que los equipos técnicos de ambos países trabajan en protocolos sanitarios y de trazabilidad para autorizar nuevas importaciones, que se enmarcan en un esfuerzo por 'revisar y modernizar' los estándares de importación de carne bovina en el contexto de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Argentina.

Por otro lado, Rollins abordó los cambios en las pautas nutricionales en EE. UU., particularmente sobre el consumo de grasas saturadas. La intención del gobierno es promover una alimentación más saludable, modificando las directrices sobre grasas y el consumo de proteínas animales, incluyendo carne, pollo y cerdo, con la finalidad de fortalecer la cadena productiva interna.

Organizaciones ganaderas estadounidenses, como la Texas Cattlemen’s Association y el National Beef Council, expresaron preocupación ante la posible introducción de carne extranjera, aunque en cantidades limitadas. Advierten que esto podría presionar los precios locales y afectar especialmente a pequeños productores, además de generar riesgos sanitarios similares a los ocurridos en las últimas décadas, cuando un brote de fiebre aftosa en el Cono Sur causó pérdidas millonarias y dañó la reputación del sistema alimentario estadounidense.

Desde Buenos Aires, el Ministerio de Economía y la Secretaría de Bioeconomía señalaron que la negociación avanza con cautela y que los técnicos argentinos trabajan para garantizar la trazabilidad de los animales provenientes de zonas libres de fiebre aftosa sin vacunación, en línea con lo establecido por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).

Si bien la apertura del mercado estadounidense sería simbólicamente relevante, su impacto económico sería limitado debido al bajo volumen estimado. En 2022, Estados Unidos levantó por un tiempo la prohibición a las importaciones argentinas, pero posteriormente se interrumpieron por discrepancias en los estándares sanitarios.