Una exasistente de Sean Diddy Combs, identificada bajo el pseudónimo Mia, declaró en el juicio por tráfico sexual en Nueva York que el rapero la agredió física y sexualmente en varias ocasiones. Entre los incidentes, relató que en el 40 cumpleaños de Combs en un hotel de Nueva York, él la invitó a beber y la besó contra la pared, paralizándola. En otra ocasión, en su residencia en Los Ángeles, Combs la penetró mientras dormía, diciendo que debía guardarse silencio. Mia también afirmó que Combs la insultaba, amenazaba con despedirla, y en varias ocasiones le arrojó objetos como un teléfono, un ordenador o un plato de espaguetis, además de empujarla y tirarla a una piscina. También reveló que preparaba habitaciones de hotel para encuentros sexuales con la cantante Cassie Ventura, obligándola a limpiar restos de aceite, cera y sangre, que Combs aseguraba ser de menstruación. Este es el duodécimo día del juicio, en el que Combs enfrenta cargos por conspiración, extorsión, proxenetismo y tráfico sexual, con más de veinte testigos.