¡El drama llega a su fin! Después de un año y medio de la trágica muerte de Roberto Wolfenson, hoy se dará a conocer el fallo del Tribunal Oral en lo Criminal N° 4 de San Isidro, que puede cambiar la historia para siempre.
Todo comenzó el 3 de noviembre del año pasado, cuando se inició el proceso judicial contra Rosalía Paniagua, la única acusada en este caso. Tras semanas de audiencias, la situación se tornó aún más tensa tras la tercera, en la que la propia Paniagua rompió en llanto y admitió su responsabilidad en el asesinato.
¿La razón? La acusada aseguró que todo sucedió cuando su ex empleador la sorprendió robando un celular en la casa. Según su versión, Wolfenson la amenazó con denunciarla, lo que llevó a una violenta confrontación. La mujer relató que primero recibió un cabezazo, después la derribó, le dio una patada en el pecho y, en un acto de violencia extrema, usó un colgante para asfixiarlo.
Pero, ¿qué dice la evidencia? La autopsia confirmó que había ADN de Paniagua bajo las uñas de Wolfenson, lo que sugiere que ambos lucharon. La perito Débora Paula Albornoza afirmó que no hay indicios de que alguien más estuviera involucrado y que los cabellos encontrados en el lugar demostraron un forcejeo intenso.
El caso también reveló que Paniagua aprovechó su puesto como empleada para robar diferentes objetos. Entre ellos, un teléfono, un parlante, joyas, dinero y otros objetos de valor por un total de aproximadamente $900.000 y USD 300, que fueron encontrados en su domicilio.
La investigación avanzó y mostró que, tras el crimen, la acusada manipuló el teléfono de Wolfenson, extrajo el chip y trató de vender la pieza. Incluso, su pareja intentó vender la pieza en un local de compra de metales. Las cámaras del country la captaron saliendo en su horario habitual, y las pruebas de geolocalización la ubican en la estación de tren de Presidente Derqui, donde presuntamente tomó el transporte luego del crimen.
Con todos estos indicios, la justicia tiene en sus manos la decisión final. Rosalía Paniagua, quien fue detenida y mantiene su situación de prisión preventiva desde el 24 de marzo pasado, espera en silencio, consciente de que hoy conocerá si su destino continúa marcado por esta trágica historia o si, por fin, se hace justicia.
