Fitch Ratings ha colocado en ‘observación positiva’ la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex), lo que abre la posibilidad de que la compañía experimente una mejora en su nota crediticia, actualmente en ‘BB’. La calificadora justificó esta decisión ante la expectativa de un mayor vínculo entre Pemex y el gobierno mexicano, tras el anuncio de una oferta pública de adquisición por casi 10 mil millones de dólares, financiada con recursos públicos. Fitch indicó que, si la licitación se realiza según lo planeado y con fondos del Estado, esto representaría una mayor influencia y control del gobierno sobre la política financiera de la petrolera, lo que podría elevar su calificación a ‘BB+’. Además, resaltó las reformas legales que permiten a Pemex compartir su límite de deuda con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, medidas destinadas a aliviar su carga financiera. No obstante, la agencia también advirtió que el perfil financiero de Pemex sigue siendo débil, con una deuda de 98 mil 800 millones de dólares al cierre de junio y gastos por intereses que superan la mitad de su EBITDA en el último trimestre. Fitch reiteró los riesgos relacionados con la falta de inversión en el mantenimiento de activos críticos, incidentes operativos y preocupaciones ambientales, factores que siguen afectando su evaluación.
