El gobernador de California, Gavin Newsom, responsabilizó este martes al expresidente Donald Trump de haber 'inflamado' la tensión en Los Ángeles con el despliegue de miles de militares, lo que generó nuevas protestas y actos vandálicos que llevaron a la ciudad a imponer un toque de queda nocturno. En una intervención televisada, Newsom señaló que la decisión de enviar a la Guardia Nacional y Marines a la ciudad, a pesar de que las autoridades locales consideraron que las protestas estaban controladas, agravó una situación que casi se vuelve explosiva. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, anunció hoy un toque de queda en el centro de la ciudad, vigente desde las 20:00 horas hasta las 6:00 del miércoles, tras el saqueo de 23 comercios en la zona durante las noches anteriores. El gobernador destacó que varias docenas de infractores se volvieron violentos y destructivos, vandalizando propiedades. Hasta ahora, 220 personas han sido arrestadas y se están revisando más casos para procesar a los responsables. Newsom reafirmó que la violencia y destrucción no serán toleradas y advirtió que quienes inciten a la violencia o destruyan comunidades deberán rendir cuentas. Además, criticó duramente la política migratoria de Trump, acusándolo de realizar deportaciones masivas que afectan a las familias inmigrantes y de traumatizar a comunidades como la de Los Ángeles. Las protestas comenzaron el pasado viernes, tras las redadas del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). El gobernador pidió a los ciudadanos ejercer su derecho a protestar de manera pacífica y criticó la estrategia del expresidente, denunciando que Trump y sus seguidores se alimentan de la división para ganar poder, recordando el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, ocurrido bajo su presunta incitación. Finalmente, Newsom enfatizó que la decisión del despliegue de la Guardia Nacional, que afecta a todos los estados, no solo involucra a Los Ángeles, sino que es una cuestión de interés nacional y colectivo.