
El gobierno laborista del Reino Unido anunció el jueves su intención de reducir la edad mínima para votar en las elecciones nacionales de 18 a 16 años. La iniciativa busca que los jóvenes, que ya trabajan y pagan impuestos, tengan voz en las decisiones gubernamentales que afectan su futuro, según afirmó el primer ministro Keir Starmer. "Creo que es realmente importante que los jóvenes de 16 y 17 años tengan derecho a voto, porque son lo suficientemente grandes para salir a trabajar, pagar impuestos y contribuir a la sociedad. Si contribuyes, deberías poder decidir en qué se gasta ese dinero", expresó Starmer.
Actualmente, solo algunos países, como Austria —que fue el primer país en la Unión Europea en bajar la edad de votar a 16 en 2007— y varias naciones latinoamericanas como Argentina, Brasil, Ecuador y Cuba, permiten que los adolescentes voten en elecciones nacionales.
La propuesta forma parte de las medidas de "modernización de la democracia británica" incluidas en el programa electoral que llevó a Starmer y a los laboristas al poder en julio de 2024. Además, contempla reemplazar la exigencia de identificación con fotografía en las urnas por el uso de tarjetas bancarias emitidas en Reino Unido, para facilitar el ejercicio del voto. La ley electoral anterior, impulsada por el gobierno conservador, restringió el acceso al exigir una identificación con fotografía, lo que, según la Comisión Electoral, impidió votar a unas 750 mil personas en las elecciones del año pasado.
El objetivo de estas reformas es facilitar que la mayor cantidad posible de ciudadanos ejerzan su derecho democrático, precisó el gobierno en un comunicado. Harry Quilter-Pinner, director ejecutivo del Institute For Public Policy Research, sostuvo que estos cambios representan "la mayor reforma en nuestro sistema electoral desde 1969", cuando se redujo la edad para votar a 18 años. Además, resaltó que bajar la edad de voto e implementar el registro automático de votantes podrían sumar 9.5 millones de personas más a las listas electorales.