El Gobierno de la Ciudad de México, encabezado por Clara Brugada Molina, informó que el Cártel de Sinaloa utilizó cámaras de videovigilancia en la capital mexicana en 2018, con la finalidad de rastrear a un funcionario del FBI de Estados Unidos. Sin embargo, precisaron que estos hechos ocurrieron antes de que Morena asumiera el control del gobierno local.
En un comunicado difundido por el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5), se especificó que los incidentes sucedieron en los últimos meses de la administración de Miguel Ángel Mancera, en un contexto en el que, según ellos, el gobierno federal y local no reconocían la existencia del crimen organizado y se maquillaban cifras de delitos, con un incremento en los homicidios dolosos.
El actual coordinador del C5, Salvador Guerrero Chiprés, afirmó que, hasta la fecha, no existen registros de intrusiones en el sistema de videovigilancia del C5 CDMX. Además, explicaron que el sistema opera bajo un esquema de seguridad integral, con redes segmentadas y aisladas que dificultan el tránsito de datos entre diferentes plataformas.
El C5, instaurado durante la administración de Claudia Sheinbaum, aseguró que no hay evidencia de vulnerabilidades o hackeos exitosos en sus sistemas. La infraestructura está diseñada para preservar la integridad y confidencialidad de la información.
Por otra parte, en 2018, durante la investigación contra Joaquín "El Chapo" Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa, un hacker contratado por la organización criminal logró acceder a información sensible de un agente del FBI asignado a la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México.
Según una auditoría del Departamento de Justicia de Estados Unidos publicada en junio de 2025, dicho hacker obtuvo registros telefónicos y datos de geolocalización del sobre el Agregado Legal Adjunto (ALAT) del FBI.