Luis Marcelo Arce Mosqueira, hijo mayor del presidente boliviano Luis Arce, fue liberado este viernes tras permanecer un día detenido por una denuncia de violencia familiar. La jueza responsable dispuso su libertad bajo la condición de que asista a sesiones de terapia durante cinco meses, medida que fue apelada por el Ministerio Público.
El acusado estaba prófugo desde el 20 de septiembre, cuando su ex pareja lo denunció ante el Ministerio Público en Santa Cruz, alegando haber sido víctima de violencia física y psicológica. Sin embargo, diez días después, la denunciante retiró formalmente la acusación, argumentando que lo hizo para evitar un proceso penal y tras aceptar las disculpas de Arce Mosqueira, con el fin de evitar la exposición pública.
Interpol Bolivia había emitido una notificación de búsqueda internacional (sello rojo) para localizar a Mosqueira, sospechando que pudo haber salido del país. El jueves, decidió presentarse voluntariamente ante la justicia acompañado de su abogado, durante una audiencia en la que declaró ante la fiscal Jessica Echeverría. En ese momento, se ejecutó la orden de captura.
Durante la audiencia, imágenes difundidas mostraron a Arce Mosqueira saliendo de la sala con rostro cubierto por un gorro y mascarilla. La fiscal informó que tanto la víctima como su abogado solicitaron no continuar con el proceso, y que la jueza calificó el caso como 'conciliación diferida', lo que podría posibilitar un acuerdo entre las partes.
El fiscal Alberto Zeballos destacó que será el juez quien decida sobre la posible conciliación, aunque resaltó que la víctima presenta afectación emocional, cognitiva y lesiones físicas confirmadas por un peritaje forense. Bolivia contempla penas de dos a cuatro años de prisión por delitos similares.
Tras estos hechos, el presidente Luis Arce expresó en la red social X (antes Twitter): “Toda denuncia contra mis hijos, quienes son mayores de edad y responsables de sus actos, debe investigarse y esclarecerse ante las instancias que corresponda, como con cualquier otro ciudadano”. Además, reafirmó su compromiso con la legalidad y su rol como padre. El mandatario también enfrenta una acusación por abandono en etapa de embarazo, presentada en 2024 por una exfuncionaria de la autoridad minera, caso que aún está en investigación.
