
La tensión aumentó en Ciudad Universitaria de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex) cuando un grupo de alumnos de la Facultad de Ingeniería irrumpió en las instalaciones que llevan tres meses en paro. La comunidad estudiantil afirmó que, tras una votación interna, la mayoría decidió levantar la protesta y entregar el edificio, exigiendo reanudar clases presenciales.
Los estudiantes que participaron en el ingreso dialogaron en un principio con los paristas en el acceso principal, quienes permanecían en el inmueble. No obstante, al no recibir respuesta favorable, lanzaron herramientas para romper la malla ciclónica y acceder, lo que derivó en un enfrentamiento con un saldo de un estudiante lesionado, herido por un extintor activado por los paristas.
Más de una decena de alumnos, identificados como ‘antiparo’, insistieron en que su acción busca recuperar los espacios de aprendizaje. En contraste, los paristas permanecieron firmes en su postura de no entregar la facultad, argumentando que hay acuerdos previos para continuar con las clases en modalidad virtual y permitir sólo el uso de laboratorios para reparaciones.
Los enfrentamientos generaron un ambiente tenso en Ciudad Universitaria. Los estudiantes en contra del paro señalaron que una votación reciente mostró que más de mil alumnos apoyan el regreso inmediato a las aulas, y que esa decisión no puede ser ignorada por un grupo reducido que mantiene cerradas las instalaciones.
Por su parte, los paristas sostuvieron que ya existe un calendario acordado, con el inicio de clases en línea previsto para el 18 de agosto y, eventualmente, el uso de espacios físicos, incluyendo laboratorios de la Facultad de Química. Sin embargo, este plan fue rechazado por quienes buscan la entrega total del edificio, alegando que no responde a las necesidades académicas de los estudiantes de Ingeniería.
Ante la situación, aproximadamente una hora después de la irrupción, el secretario de Gobernanza Universitaria, Jorge Vásquez Caicedo, acudió para facilitar un diálogo entre las partes. Su presencia dividió opiniones: algunos estudiantes exigían negociación inmediata, mientras otros preferían mantener la resistencia. La llegada de la autoridad universitaria intensificó la tensión, pues se comenzaron a definir las reglas para una mesa de negociación.
Representantes del colectivo Enjambre Estudiantil Unificado solicitaron participar en el diálogo, encendiendo un debate sobre la legitimidad de los interlocutores. Durante las conversaciones, los estudiantes que lograron ingresar reforzaron que la decisión de seguir en línea no refleja la voluntad de la mayoría, que votó por la recuperación de las aulas y laboratorios.
Los paristas aseguraron que la modalidad virtual es solo una medida temporal para mantener los objetivos del paro y evitar confrontaciones mayores, indicando que los acuerdos previos establecen condiciones claras para una reanudación gradual de actividades, y que la irrupción vulnera la organización interna y afecta otros espacios en paro.
Hasta el momento, las mesas de diálogo estaban en proceso de negociación, sin llegar a un acuerdo definitivo para la entrega del edificio. La única certeza es que el calendario universitario indica el 18 de agosto como inicio de clases, lo que hace urgente resolver la situación de la Facultad de Ingeniería para no afectar a los estudiantes inscritos.
Este conflicto en Ingeniería se suma a otros en diferentes áreas de la UAEMex, donde persisten divisiones entre grupos estudiantiles respecto a la pertinencia de los paros y las formas de protesta.