El Estado de México registra un aumento significativo en casos de tos ferina durante 2025, con 94 contagios reportados hasta la Semana Epidemiológica 34, en comparación con solo uno en el mismo periodo de 2024, lo que ha generado preocupación entre especialistas en salud.
Según el Boletín Epidemiológico estatal, siete municipios concentran la mayoría de los casos de esta enfermedad. El pediatra Esteban Ramírez, egresado de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), explicó que la tos ferina es una infección bacteriana altamente contagiosa del sistema respiratorio, que provoca ataques de tos violentos e incontrolables.
‘Puede afectar a cualquier persona, pero es especialmente peligrosa y potencialmente mortal en bebés no completamente vacunados; es la principal causa de mortalidad en este grupo’, advirtió.
Los síntomas generalmente comienzan como un resfriado común, con secreción nasal y fiebre leve. Sin embargo, tras varias semanas, la enfermedad evoluciona a ataques de tos severos que pueden causar vómito, rotura de vasos sanguíneos en los ojos y la piel, e incluso apnea, que es la detención de la respiración.
Entre las complicaciones graves se incluyen neumonía, insuficiencia respiratoria, encefalopatía, discapacidad permanente e incluso la muerte.
El especialista resaltó la importancia de la vacunación como principal medida preventiva: ‘Es fundamental que las madres se vacunen durante el embarazo para proteger al recién nacido, y que los bebés completen su esquema de vacunación en tiempo y forma’. También destacó la relevancia de que las mujeres embarazadas reciban dosis contra influenza, tos ferina y difteria, para fortalecer sus defensas y reducir riesgos para los recién nacidos, aseguró Miguel Ángel Gutiérrez, geriatra y experto en Salud Pública.
De esta forma, las autoridades y especialistas hacen un llamado a reforzar la vacunación y mantener medidas preventivas para evitar que la enfermedad siga en aumento y cause mayores complicaciones.