El periodista guatemalteco José Rubén Zamora Marroquín cumple este 29 de julio su tercer año en prisión, acusado por la Fiscalía de delitos como lavado de dinero y obstaculización de la justicia, en un proceso que organizaciones locales e internacionales consideran injusto y motivado políticamente, ya que no ha sido declarado culpable y los cargos permanecen sin prueba. Su hijo, Ramón Zamora, denuncia que su detención fue arbitraria, con fiscales que supuestamente fabricaron casos y jueces que violaron el debido proceso. El fundador del diario El Periódico ha sido señalado por críticos y órganos de derechos humanos por la percepción de que su encarcelamiento responde a su trabajo de denuncia contra la corrupción en el gobierno de Alejandro Giammattei, quien ocupa la presidencia desde 2020. Tras su arresto en 2022, Zamora Marroquín estuvo en prisión, salvo un breve período en prisión domiciliaria, y es considerado por varias organizaciones, como la Sociedad Interamericana de Prensa, Reporteros Sin Fronteras y el Comité de Protección a Periodistas, como un prisionero político. Aunque en 2021 recibió el premio a medio destacado de Iberoamérica otorgado por el Rey Felipe VI de España, la Fiscalía y el Ministerio Público, cuya cúpula ha sido sancionada por EE. UU., Canadá y la Unión Europea por corrupción, continúan con los procesos en su contra, que permanecen sin resolución.