Ximena Castellanos Santibáñez, remadora de alto rendimiento y actual seleccionada nacional, destaca como una de las jóvenes promesas deportivas de México. Con 21 años, su carrera ha tenido logros significativos, como la medalla de plata en los Juegos Panamericanos Júnior de 2021 en Santiago de Cali y Valle del Cauca, Colombia.
Con una madurez deportiva en desarrollo, la atleta del Estado de México se está preparando para buscar su clasificación a los Juegos Panamericanos de Asunción 2025, objetivo que dependerá de su rendimiento en la próxima evaluación oficial de la Federación Mexicana de Remo.
Originaria de León, Guanajuato, Ximena inició en el deporte con natación y luego en taekwondo, disciplina que practicó durante siete años. Sin embargo, por la distancia a los entrenamientos, tuvo que abandonar el taekwondo y fue entonces cuando descubríó el remo.
‘Conocí el remo cerca del Parque Metropolitano en León, Guanajuato, cuando un profesor me invitó a probarlo. Al principio pensé: “¿remo?, si aquí ni hay agua”. Pero cuando fui, me encantó. Me transmitió mucha paz. Este deporte requiere desconectarte de todo para poder concentrarte y remar’, compartió en entrevista con El Sol de Toluca.
Desde su inicio en 2019, su progreso ha sido constante. Solo tres meses después de comenzar, participó en su primer Campeonato Nacional en la Ciudad de México, donde obtuvo el segundo lugar en la categoría de novatas. Ese resultado y la adrenalina de competir la motivaron a seguir en el deporte.
‘Es un deporte muy completo. Cada carrera es impredecible, por eso me encanta’, afirmó.
Aunque nació en Guanajuato, actualmente representa al Estado de México, decisión que tomó por su vínculo con la entrenadora Lourdes Montoya Castorena, presidenta de la Asociación de Remo del Estado de México y exatleta olímpica.
‘Con Lourdes empecé a entrenar en 2019. Me impresionó su trayectoria y su forma de trabajar. Ella me impulsó a dar el salto de nivel y me ha apoyado desde entonces, incluso prestándome un bote para competir cuando recién llegué a la Ciudad de México’, relató.
Ximena también explicó que la falta de instalaciones y apoyo técnico en Guanajuato influyeron en su decisión de cambiar de estado. Desde los 16 años, vive en la Ciudad de México, donde entrena en la Pista de Remo y Canotaje ‘Virgilio Uribe’ en Cuemanco, uno de los pocos centros especializados en el país.
‘No fue fácil dejar mi estado y a mi familia, pero sabía que era el paso necesario para seguir remando. Ahora veo a mi mamá cada mes, pero cada sacrificio valió la pena’, expresó.
Además de su objetivo de clasificar a Asunción 2025, Ximena sueña con representar a México y al Estado de México en unos Juegos Olímpicos, con Los Ángeles 2028 como horizonte.
‘Me gusta superarme a mí misma. Representar a México en unos Olímpicos es mi mayor sueño. Me inspiran atletas como María del Rosario Espinoza y Kenia Lechuga. Sé que el camino es largo, pero nada es imposible si trabajas con disciplina’, afirmó con convicción.
La historia de Ximena refleja a una joven que se reinventa y toma decisiones valientes para perseguir sus sueños. Su transición del taekwondo al remo, su cambio de entidad deportiva y su dedicación diaria muestran una mentalidad de triunfadora.
Con la mira en los Juegos Panamericanos de Asunción 2025 y en llegar a unos Olímpicos, la remadora mexiquense representa a una nueva generación de deportistas mexicanos que combinan talento, disciplina y pasión. Si algo ha demostrado hasta ahora, es que está dispuesta a ‘remar contra corriente’ para alcanzar la gloria.