En días recientes se difundió un video en el que adultos y niños persiguen con palos a varias iguanas que corren por el suelo, en un acto asociado al Kots Kaal Pato, una tradición del pueblo de Citilcum, Yucatán, que se celebra anualmente en honor a San Bartolo.
Aunque sus orígenes exactos son desconocidos, se considera que esta práctica podría ser una herencia de la colonización española, en la que se adaptaron ritos prehispánicos a las festividades católicas para evangelizar a los pueblos originarios.
Celebrada en mayo, la festividad de San Bartolo o Kots Kaal Pato es una de las tradiciones mayas que más evidencia crueldad hacia los animales, ya que en Citilcum se elaboran piñatas que en lugar de dulces contienen animales pequeños, denominados “alimañas”, como iguanas, zarigüeyas y tlacuaches, a las que golpean hasta romperlas. Cuando los animales caen al suelo, si no están muertos, son perseguidos y asesinados por la comunidad.
Otra parte brutal de la celebración consiste en colocar una estructura de madera con un pato colgado de cabeza, de donde proviene el nombre de la tradición. Los participantes compiten para romper el cuello del ave, logrando desprender su cabeza.
En 2016, tras darse a conocer esta práctica en un reportaje de Vice, Humane Society International México solicitó a la comisaría de Citilcum que eliminara el maltrato animal en esta festividad sin afectar las creencias religiosas.
Aunque inicialmente los adultos rechazaron la propuesta, la organización pro animales continuó promoviendo la concientización en las escuelas para que los niños cambien su percepción respecto a esta tradición, además de ofrecer alternativas de entretenimiento libres de crueldad animal.