La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que el país logró un acuerdo con Estados Unidos para que la reapertura y cierre de la frontera en relación con las exportaciones de ganado no sea decisiones arbitrarias, sino basadas en indicadores técnicos. Esto, tras la preocupación por la propagación del gusano barrenador de ganado en la región.
Durante la conferencia matutina, Sheinbaum explicó que el acuerdo establece que la decisión de abrir o cerrar la frontera estará fundamentada en reportes técnicos sobre los esfuerzos del gobierno mexicano para controlar la dispersión de ese parásito, y no en decisiones unilaterales. "Eso lo aceptaron y lo que está por definirse en unos días", detalló.
Además, señaló que un equipo de la Secretaría de Agricultura de Estados Unidos realizó varias semanas de revisión en territorio mexicano para evaluar las acciones que realiza México para prevenir la expansión del gusano barrenador. "Terminaron hace unos días y han concluido que en México se está haciendo todo lo posible para evitar mejorar la contaminación", afirmó Sheinbaum.
Por su parte, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) confirmó un nuevo caso del gusano barrenador en ganado de Sabinas Hidalgo, Nuevo León, a unos 100 kilómetros de la frontera con Estados Unidos. Esta detección reavivó las alertas en la región y motivó que el Departamento de Agricultura estadounidense anunciara un plan para proteger sus fronteras, incluso sin la colaboración mexicana.
El 11 de mayo, las autoridades estadounidenses cerraron la frontera para las importaciones de ganado en pie provenientes de México y Sudamérica, debido a la expansión del gusano en el sureste de México. Aunque se preveía la reapertura gradual en cinco puntos fronterizos entre julio y septiembre, un nuevo caso en Veracruz provocó el cierre de dichas fronteras nuevamente.
Este contexto ha llevado a que, tras varias semanas de diálogo, ambas naciones negocien un sistema basado en criterios técnicos para gestionar la reapertura de la frontera, priorizando la salud sanitaria del ganado y el trabajo conjunto para controlar la enfermedad.