Miles de mexiquenses que diariamente viajan desde municipios de la zona oriente del Estado de México a la Ciudad de México enfrentan retrasos de hasta seis horas debido a lluvias intensas, carreteras cerradas, transporte público interrumpido y vialidades inundadas. Vecinos de Ixtapaluca, Chalco y La Paz reportan que su traslado cotidiano dura entre dos y tres horas, pero las afectaciones incrementan este tiempo hasta el doble o más durante las lluvias.
Daniela, originaria de Ixtapaluca y empleada en Polanco, relata que ha tenido que regresar a la Ciudad de México en dos ocasiones, rentar habitaciones en hoteles y perder dinero por las inundaciones en calles como Zaragoza y la ineficiencia del metro, imposibilitando cruzar a su casa y afectando su descanso y trabajo.
La problemática afecta a residentes de municipios como Chalco, Valle de Chalco, Texcoco, Chicoloapan, Chimalhuacán y zonas de los Volcanes, quienes en horas nocturnas enfrentan dificultades adicionales tras lluvias atípicas y una red de drenaje deficiente que colapsa durante las tormentas.
La Avenida Calzada Ignacio Zaragoza, vía principal que conecta la zona oriente con el centro y sur de la Ciudad de México, se ha convertido en un punto crítico. En las últimas semanas, inundaciones en tramos cercanos al distribuidor vial La Concordia y bajo puentes en La Paz han provocado cierres totales, paralizando el tránsito de miles de vehículos y transporte público concesionado.
Las autoridades capitalinas indican que estos problemas son causados por una cuneta en la zona, que junto con un sistema de drenaje sobrepasado por las lluvias, retiene grandes volúmenes de agua. Además, expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México señalan que la localización de Zaragoza en la parte más baja de la cuenca de la capital, anteriormente cubiertas por lagos de Chalco y Texcoco, agrava las inundaciones.
Nancy, con residencia en Chalco y empleada en la alcaldía Miguel Hidalgo, relata haber caminado seis kilómetros desde la estación Guelatao hasta Acatitla tras la suspensión del servicio de la Línea A del Metro por las inundaciones en el tramo La Concordia. La afectada dice que salió de su trabajo a las cinco de la tarde y llegó a su domicilio a las doce de la noche, tras horas de caminar y buscar transporte.
Muchos afectados han tenido que caminar horas en busca de medios alternativos, pero denuncian un abandono por parte del gobierno mexiquense, que no ofrece soluciones ni alternativas claras. Mientras tanto, en la Ciudad de México, el gobierno anunció planes para construir un colector en la calzada Zaragoza y actualizar el proyecto, con el fin de prevenir futuras inundaciones. Estas obras, propuestas hace años, serán ejecutadas en 2026, con apoyo adicional del Estado de México, y buscan mitigar los daños de las lluvias extremas, que en julio alcanzaron una precipitación de 298 litros por metro cuadrado, el doble del promedio histórico.