El calentamiento global permitió el descubrimiento de un cuerpo en estado de congelación en las montañas de Kohistan, al norte de Pakistán, donde un pastor local encontró el cadáver de un hombre que desapareció hace 28 años. La víctima, identificada como Nasseruddin, fue hallada al borde del glaciar Lady Meadows, en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa. Según relataron sus familiares, Nasseruddin y su hermano huyeron a las montañas tras una disputa familiar en junio de 1997. Durante la huida, Nasseruddin quedó atrapado en una grieta del glaciar y no pudo salir, mientras que su hermano logró sobrevivir en la zona nevada. A lo largo de los años, sus familiares intentaron recuperar su cuerpo sin éxito, debido a la dificultad de acceder a esa región. El reciente derretimiento del glaciar, causado por el aumento de las temperaturas, permitió que el cuerpo emergiera completamente conservado. Nasseruddin, de 31 años al momento de su desaparición, permaneció intacto, incluso sin daños en su ropa, gracias a la protección del hielo que mantuvo su forma. Tras el hallazgo, los habitantes de la zona reconocieron a la víctima, quien antes de su desaparición estaba casado y tenía dos hijos. Según relatos de los vecinos, huyó a caballo tras un altercado familiar que lo obligó a abandonar su hogar. Otra versión indica que Nasseruddin ingresó a una cueva y desapareció allí, y que su hermano, buscando ayuda, acudió a los habitantes del lugar. La historia de este hallazgo conmueve y resalta el impacto del cambio climático en las regiones montañosas del país.
