Tras la polémica generada por la consejera estatal de Morena en Jalisco, Melissa Cornejo, quien publicó en redes sociales un mensaje ofensivo tras la cancelación de su visa por parte del Departamento de Estado de Estados Unidos, el coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, exhortó a sus correligionarios a mantener la calma y dejar en manos de la presidenta Claudia Sheinbaum la conducción de las relaciones diplomáticas con Estados Unidos.
“Es momento de guardar mesura”, señaló Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política, resaltando que provocar con declaraciones públicas no favorece la relación bilateral con Washington. “Nada ganamos con insultar o con posturas confrontativas”, agregó, intentando mitigar los efectos políticos del incidente que alcanzaron la atención internacional. Aunque no mencionó directamente a Melissa Cornejo, su mensaje fue dirigido claramente a la militancia, que reaccionó con agresividad ante las recientes tensiones con autoridades estadounidenses.
Monreal insistió en que la política exterior corresponde a la presidenta Claudia Sheinbaum y pidió que se le deje liderar dichas acciones con seriedad, evitando declaraciones polarizantes desde el partido. “Debemos actuar con prudencia. No hay que enrarecer aún más el clima con un país con quien tenemos relaciones estratégicas profundas”, afirmó.
Este llamado se produce después de que Cornejo compartiera una imagen de una protesta contra ICE (Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos) con la frase: “’Van a quitar visas a quienes compart…’ Viva la raza y métanse mi visa por el culo”. La respuesta del vicecanciller Landau, cancelando la visa, desató una serie de reacciones en las redes sociales, con apoyos y cuestionamientos a la actitud de la militante.
El gesto de Monreal busca contener los daños y evitar que Morena se involucre en una confrontación mayor con el gobierno estadounidense, en un contexto donde Washington ha señalado que la presidenta Claudia Sheinbaum promueve movilizaciones contra su país por el gravamen a las remesas y las redadas del ICE. La postura de Monreal apunta a priorizar la prudencia y mantener la estabilidad en las relaciones internacionales del país.
