El nivel del río Lerma continúa en alerta debido a las lluvias de los últimos días, que lo han mantenido casi al cien por ciento de su capacidad en diferentes tramos. En municipios como San Mateo Atenco, autoridades municipales realizan monitoreo constante ante las filtraciones y nuevas inundaciones en zonas cercanas al afluente.
En los últimos dos meses, comunidades de Ocoyoacac, Lerma y Toluca han reportado afectaciones por desbordamientos y filtraciones provenientes del Río Lerma, afectados que también incluyen encharcamientos en autopistas y caminos principales, poniendo en riesgo a automovilistas que cruzan las zonas inundadas.
El sector agrícola en Lerma ha sufrido pérdidas significativas, con reportes de hasta el 80% en cultivos de maíz debido a la humedad excesiva que ha acabado pudriendo las plantas. Además, la presencia de lirio acuático cubre gran parte de la superficie del río, dificultando la medición precisa del nivel del agua y evidenciando la proliferación de una especie invasora que, según especialistas y ambientalistas, amenaza la calidad del ecosistema al reducir oxígeno, dañar la flora y fauna, y generar contaminación.
A pesar del incremento en el nivel del caudal, los habitantes situados en las márgenes del río expresan cierta confianza en que no se replicarán las graves inundaciones de años anteriores. 'Sí estamos pendientes del río, pero esperamos que no pase más y no nos inundemos; confiamos en que todo siga bien', comentó un residente.
Por otra parte, los pobladores de comunidades ya afectadas exigen la implementación de proyectos de prevención y control para evitar futuras catástrofes, reiterando la necesidad de acciones concretas que protejan su patrimonio y el bienestar de la región.
