Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, se encontró con el expresidente Felipe Calderón durante un vuelo en Campeche. A través de sus redes sociales, Noroña compartió el encuentro y lo calificó como “Tomandante Borolas”, haciendo referencia a Calderón, a quien señaló por asistir presuntamente a una boda de Ernesto Cordero.
Noroña comentó que el expresidente estaba en una boda en Campeche y criticó que Calderón no perdiera oportunidad de “ponerse persa gratis”. También acusó al piloto de Aeroméxico de ser un “lambiscón y admirador” de Calderón, señalando: “El piloto de @Aeromexico es un lambiscón y admirador de la usurpación de Felipe Calderón. En fin, así va la vida”. Además, bromeó sobre la dificultad para aterrizar, diciendo que si hubieran ocurrido inconvenientes, ellos podrían haberse “chupado la bruja” en el vuelo.
Al descender del avión, Noroña afirmó que hubo un momento de tensión cuando el hijo de Calderón intentó reclamarle. Según su relato, el joven intentó hacerle una reclamación y, al buscar a su padre entre los acompañantes, no pudo encontrarlo. Noroña aseguró que, de no haberse escondido, le habría dicho “lo que siempre le he dicho” al expresidente.
En sus publicaciones, Noroña señaló que dejó que Calderón huyera de la situación. “Dejo correr y hablan de cobardía. Le he dicho lo que es todo el tiempo. Y hoy se me escondió a la salida del aeropuerto. Aunque francamente no pensaba decirle nada”, expresó.
Este incidente ocurre días después de que Noroña generara polémica por un vuelo a Francia en asiento de clase business. Tras difundirse una fotografía del senador en ese asiento, él reconoció que sí viajó en esa clase y compartió un cheque por 36 mil 480 pesos que recibió de la Cámara Alta por dicho boleto. Aseguró que la cantidad “está transparentada” y que corresponde al gasto del recurso público, sin explicar detalles adicionales sobre posibles cargos extras.