Después de siete años sin actualizaciones, el Gobierno del Estado de México presentó la versión renovada del Atlas de Riesgos 2025, una herramienta clave para detectar y prevenir emergencias en los 125 municipios de la entidad.
Este proyecto, resultado de un esfuerzo conjunto que duró aproximadamente un año, involucró a expertos, académicos, autoridades municipales, iniciativa privada y ciudadanía. Su finalidad es crear una base de datos accesible que permita comprender mejor los riesgos a los que está expuesta cada localidad.
El Atlas ahora no solo recopila información científica, sino que también funciona como un recurso práctico para que las autoridades municipales puedan consultarlo y actualizar sus datos de forma permanente, facilitando decisiones más informadas y respuestas más efectivas ante desastres.
Una de las principales novedades es la apertura de una plataforma pública en línea, que permite a cualquier ciudadano visualizar los diferentes fenómenos naturales y riesgos específicos de su municipio. Esto facilita la planificación de obras, la instalación de sistemas de alerta y el fomento de la cultura de prevención.
En esta actualización, el Atlas incrementó de 44 a 131 mapas y amplió el monitoreo de fenómenos naturales de 15 a 26 tipos diferentes. Además, incorpora 930 capas de información sobre riesgos como lluvias intensas, incendios forestales, sismos, actividad volcánica y deslizamientos, entre otros, reforzando la capacidad de respuesta y prevención en la región.