La Policía del estado de Michigan presentó cargos contra Charla Pendergrass de 49 años y su hijo Jalen Pendergrass de 23 años por el presunto asesinato de London Thomas, una adolescente de 17 años reportada como desaparecida en abril pasado. Ambos enfrentan acusaciones de homicidio en segundo grado y manipulación de pruebas. La familia de Thomas reportó su desaparición el 6 de abril, un día después de su última vista en Inkster, Michigan.
Los restos de London Thomas fueron encontrados el 26 de abril en un SUV en Southfield, aproximadamente dos semanas después de su desaparición. La policía halló su cuerpo dentro de un contenedor de plásticos sellado. Un amigo de la madre acusada declaró que ayudó a trasladar dicho recipiente a petición de Charla Pendergrass unos días después de la desaparición, aunque afirmó no saber su contenido.
La autopsia confirmó que la causa de muerte fue asfixia, calificándola como homicidio. La investigación, coordinada por la Policía Estatal de Michigan, la Policía de Inkster, la Policía de Detroit y el FBI, reveló evidencia clave, incluyendo registros telefónicos y videos, que contradicen las versiones iniciales de los acusados.
Las autoridades indican que Charla Pendergrass proporcionó información falsa durante la investigación, lo cual llevó a solicitar una fianza de 5 millones de dólares. Además, se sostiene que la madre mintió respecto a ver a Thomas abandonar su vivienda la madrugada en que desapareció. La madre y el hijo fueron detenidos el jueves pasado. Jalen Pendergrass permanecerá detenido sin fianza, ya que enfrenta otro proceso en Oakland County por reportar falsamente un delito y fue arrestado mientras gozaba de fianza en ese caso.
Ambos comparecieron ante la Corte del Distrito 22 de Inkster, declarando su inocencia y asegurando que se declaran no culpables. Diversas fuerzas de seguridad participaron en la búsqueda y recuperación del cuerpo, destacando la colaboración entre la Policía Estatal, la Policía de Detroit y el FBI, que fue fundamental para obtener evidencia sólida, como registros telefónicos y video grabaciones.
La fiscal del condado de Wayne, Kym Worthy, resaltó que la investigación exigió arduo trabajo y largas jornadas para formular los cargos.
Los familiares de London Thomas expresaron sentimientos encontrados tras meses de incertidumbre. Cedric Salisbury, su padre, afirmó: “Estoy enojado y satisfecho a la vez. Todos sabíamos que ellos eran responsables, y ahora buscamos justicia para London”. Darnell Johnson, padrastro de la víctima, afirmó que el dolor por su pérdida continúa diariamente.
La próxima audiencia, denominada conferencia de causa probable, se realizará el 22 de octubre en el tribunal de Inkster. Los sospechosos mantienen su postura de inocencia y esperan continuar el proceso, ya sea en custodia o bajo estrictas condiciones de fianza. La atención mediática sigue atenta a este caso, dado la gravedad de los cargos y la violencia implicada.
