En los últimos dos meses, la zona oriente del Estado de México ha registrado casi una decena de socavones, principalmente en La Paz, Chimalhuacán y Nezahualcóyotl. Los habitantes denuncian que la falta de información oficial genera incertidumbre y temor entre la población.
“Cada semana aparece un socavón nuevo y nos da miedo porque no nos explican por qué salen o la razón de su proliferación”, expresó Ramón, residente de La Paz.
El 25 de septiembre, un camión recolector del ayuntamiento quedó atrapado en un socavón de aproximadamente un metro de longitud en la colonia La Perla, Nezahualcóyotl. Tras varias horas de trabajo, personal municipal, con ayuda de una grúa y otro camión de basura, logró retirar el vehículo, dejando al descubierto la oquedad que mantiene en alerta a los vecinos de la calle Poniente 17.
En La Paz, en los últimos 10 días se reportaron al menos dos socavones: uno frente a la escuela Gustavo Baz y otro en un bajo puente de Rincón de Los Reyes. Ambos incidentes afectaron la circulación vial.
El primero ocurrió cuando un camión de refrescos quedó atrapado frente a la escuela. Autoridades retiraron el vehículo y se comprometieron a reparar las afectaciones en la zona. Los vecinos sugieren que trabajos previos en la red hidráulica podrían haber debilitado la cinta asfáltica.
El segundo socavón, localizado en una zona de alta afluencia de transporte público y vehículos particulares, ya fue reparado por las autoridades locales como parte de labores de mejora en las redes de captación de agua pluvial.
En Chimalhuacán, un socavón ocasionado por trabajos de mantenimiento en la red de drenaje provocó retrasos en el regreso a clases de más de 600 estudiantes de la escuela Benito Juárez, que comprende jardín de niños, primaria y telesecundaria. La oquedad alcanzó más de siete metros de diámetro y, según vecinos, fue agravada por las recientes lluvias y la falta de atención oportuna.
Autoridades municipales aclararon que, en realidad, no se trató de un socavón, sino de la rehabilitación de un colector de drenaje.
Habitantes de Chimalhuacán, La Paz y Nezahualcóyotl han solicitado a las autoridades de cada municipio una respuesta inmediata, debido a que la aparición constante de estos hundimientos incrementa los temores sobre la seguridad de las colonias y la integridad de la infraestructura vial.